LEIRE PÉREZ
- Su diseñador, Gabriele Teruzzi, quiere que el propietario del yate se sienta todopoderoso, rodeado por la inmesidad del mar y el cielo.
- Por ahora tan sólo es un prototipo, pero su precio de salida podría rondar los 220 millones de euros.
- La embarcación se caracteriza por una terraza suspendida a casi 40 metros de altura, donde se sitúa la suite principal de 150 metros cuadrados.
- FOTOGALERÍA: El yate Shaddai.
Cuando Gabriele Teruzzi tenía delante la hoja en blanco donde diseñar este barco, no sabía cuál sería el resultado final, pero algo tenía muy claro, quería transmitir la sensación de omnipotencia. Quería que el propietario se sintiese todopoderoso.
De ahí el nombre del barco Shaddai, palabra hebrea que significa omnipotente o todopoderoso.
El joven diseñador de 27 años, quiere que su «obra maestra» compita en el mercado del lujo náutico y quiere hacerlo por todo lo alto, con esta embarcación caracterizada por una terraza suspendida a casi 40 metros de altura.
Desde la cubierta principal se eleva un brazo que termina en una plataforma donde está situada la suite principal de 150 metros cuadrados y una terraza de 350 m2. Un lugar perfecto para ver la puesta de sol rodeado por la inmensidad del mar y el cielo.
Además cuenta con una «terraza infinita», un amplio salón donde comer al aire libre y un lujoso bar. Tal y como declara su creador, Gabriele Teruzzi: «Desde ahí se puede llegar a la sensación de un poder superior, alcanzando las nubes donde todo refleja este lugar en el mundo: en la parte superior. Además, la piscina de borde infinito produce un efecto visual sin límites, fundiéndose con el cielo».
En la cubierta inferior se encuentra lo que Teruzzi ha denominado como «club de playa», un espacio de 300 metros cuadrados conectado con la cubierta principal gracias a la piscina infinita. Esta piscina se convierte en el techo del club de playa, dando una sensación de frescura y ventilación, y cuenta también con una cascada que se puede escuchar desde las distintas zonas del yate.
Un imponente acuario preside la sala y crea la unión entre los dos lados de la embarcación. Los materiales utilizados para el mobiliario están inspirados en los diseñadores italianos y el interior está decorado en tonos verdes, azules y turquesas para aportar elegancia y seguir «la estela de armonía del mar».
Las amplias terrazas con tumbonas para tomar el sol y sofás para disfrutar de las vistas y relajarse están presentes en todos los rincones del yate.
Por ahora este barco tan sólo es un prototipo que su diseñador ha plasmado en una maqueta 3D.
Source: Coches
