El sector profesional de transporte de personas, es decir, los taxis, VTC o los vehículos de servicio turístico, tiene en el e-Traveller un excelente producto a considerar desde que se lanzó allá por 2016, pero en este segundo semestre del año la elección se hace más difícil (o fácil) porque llega la variante eléctrica, la más sostenible de la gama.
Pero los particulares también se pueden beneficiar de sus ventajas, al menos las familias numerosas o aquellos que necesiten con frecuencia mucho espacio para personas o equipaje.
Sea cual sea el uso, el e-Traveller tiene como denominador común un motor eléctrico de 100 kW de potencia, el equivalente a 136 caballos, que se puede combinar con baterías de 50 o 70 kWh. En función de la elección, la autonomía máxima puede ser de 230 o 330 kilómetros, así que hay que analizar bien cuál va a ser la utilización y dónde y cómo se va a recargar.
A este respecto cabe apuntar que en un punto de carga de 7,4 kW, de los que se puede instalar sin complicación en una casa, el tiempo de recuperación de energía va de 7 horas y media a algo más de 11, pero quien tenga cerca un cargador de alta potencia o una “electrolinera”, solo necesitarán entre 30 y 45 minutos para realizar la operación.
El e-Traveller está disponible en tres medidas: Compact, Standard y Long, que van de los 4,6 a los 5,3 metros de longitud, en todos los casos con una altura de 1,9 metros, y eso da espacio para mucho.
Las versiones profesionales o «lanzadera» pueden albergar hasta 9 personas y tienen un equipamiento específico (líneas Business y Business VIP) para que los ocupantes disfruten de mucho confort y cierto lujo en el interior. Por su parte, las versiones familiares (con acabados Active y Allure) gozan de una modularidad diferente y puede albergar hasta las 8 plazas, con recursos como mesas “tipo avión” en la segunda fila de asientos.
En cuanto al espacio de carga para el equipaje, en una configuración de 5 o 6 plazas, la cifra puede llegar hasta los 3.000 litros de capacidad, pero además en el habitáculo hay diferentes espacios y huecos que aportan 74 litros más para guardar o alojar objetos.
Además del confort acústico que supone el que no se impulsado por un motor de combustión, la conducción del e-Traveller es tan placentera como la de un turismo. Para gestionar el funcionamiento del motor hay tres programas, Eco, Normal y Power, que preservan o aportan más potencia según sean las necesidades, lo que redunda en una mayor o menor autonomía.
Asimismo, cuenta con un sistema de recuperación de energía que funciona con solo levantar el pie del acelerador y con un sistema de control de tracción, denominado “Grip Control”, que se adapta a un uso moderado fuera del asfalto, ya sea sobre nieve, arena o caminos.
Por lo demás, aparte de un cuadro de instrumentación analógico con información específica, como el referido a la carga de baterías, el e-Traveller puede contar, según el nivel de equipamiento, con puertas laterales deslizantes de apertura y cierre con manos libres, regulador y limitador de velocidad, cámara de marcha atrás, alerta de cambio involuntario de carril, reconcimiento de señales de tráfico, sistema de vigilancia de ángulo muerto, entre otros elementos. También está disponible el paquete de conectividad My Peugeot con un buen número de servicios. Los precios del e-Traveller aún no han sido comunicados.
Source: Coches