El colectivo de conductores de ciclomotores y motocicletas es uno de los más vulnerables tanto en carretera como en ciudad, debido a su convivencia estrecha y diaria con otros vehículos a motor y a la ausencia de carrocería por parte de los pilotos de las dos ruedas, que sufren más lesiones en caso de colisión o caída.
En numerosas ocasiones, los conductores de vehículos de cuatro ruedas tienen actitudes o desarrollan maniobras que ponen en peligro la integridad física de los motoristas: no respetar las distancias de seguridad, adelantamientos indebidos, tirar colillas por la ventanilla, accionar el limpiaparabrisas sin mirar…
Y los excesos de velocidad también forman parte de esta lista, aunque también los motoristas pecan de ello. Por eso, desde Anesdor se ha valorado de forma positiva la reducción de los límites de velocidad en ciudad. Su secretario general, José María Riaño, ha considerado que la pacificación del tráfico en las ciudades es muy importante y forma parte de un abordaje «integral» de la siniestralidad. «Estos cambios contribuirán a reducir significativamente la gravedad de los siniestros”, ha augurado.
En 2019 los usuarios vulnerables (peatones, ciclistas y motoristas) fueron el 53% de las víctimas por accidentes de tráfico en España y esta cifra alcanzó el 82% en las ciudades. La reducción de las velocidades a 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación, a 50 km/h en vías de 2 o más carriles por sentido y a 20 km/h en vías que dispongan de plataforma única de calzada es una manera de reducir la gravedad de las lesiones en caso de accidente y las probabilidades de colisión.
A este respecto y desde Anesdor también han valorado positivamente el anteproyecto que modifica la Ley de Tráfico y en el que se aumentan las sanciones a aquellos motoristas que no lleven el casco obligatorio correctamente abrochado.
Source: Coches
