Mar. Nov 19th, 2024

Cuando uno habla de Smart, la mente enseguida nos lleva a aquellos pequeños coches urbanos, baratos y para el día a día que solían representar el concepto de movilidad para las ciudades de manera perfecta. Sin embargo, hace ya unos años que Daimler (Mercedes-Benz), vendió la mitad de la marca al grupo chino Geely, propietario también de marcas como Volvo, Polestar o Lynk & Co, y parece que los modelos de la nueva era se alejan de todos aquellos conceptos que moldearon la que, hasta ahora, era la personalidad de Smart.

Así, el primer modelo nacido de la asociación Alemania-China ya auguraba un cambio de concepto, con el #1 presentándose con un considerable tamaño y en forma de SUV compacto de 4,27 metros de largo. Pues bien, la nueva criatura que ha engendrado Smart, y que 20Minutos ya ha podido probar en su presentación internacional, recibe el nombre de #3 y, tal y cómo sugiere el número mayor de su nomenclatura, es más grande todavía.

El #3 es un SUV del segmento C (el más vendido en Europa), que mide 4,40 metros de largo, 1,84 metros de ancho y 1,56 de alto, convirtiéndose así en el modelo más grande hasta la fecha de toda la historia de Smart. Su diseño sigue la dirección que abrió el #1, con líneas suaves y curvas dominando la carrocería, un techo que crea la ilusión de ser flotante y que aporta un aspecto de SUV coupé a la carrocería, un frontal y una trasera dominados por los faros y los pilotos traseros, ambos unidos entre sí por una tira LED que crea un mayor efecto de anchura en el coche, llantas de hasta 20 pulgadas en la variante Brabus (19 en las normales).

Dentro de su habitáculo es donde más destaca el Smart #3. Puede que el coche se fabrique en China, pero aquí se nota la mano alemana, aunque seas medio ciego. Desde el diseño del puesto de conducción hasta los materiales empleados, el habitáculo del #3 parece el de un Mercedes-Benz en toda regla. De hecho, si en el volante pusieras la estrella, no se daría cuenta nadie. Cuero, aluminio, plásticos blandos, costuras en contraste, asientos perforados, Alcantara…, la sensación de calidad es absoluta.

También nos gustó bastante el apartado tecnológico que trae, desde el cuadro de instrumentación digital, realmente pequeño, pero muy bien diseñado, con la información necesaria, un aspecto minimalista, sencillo de leer y muy bien ejecutado a nivel de grafismos; hasta la pantalla central del sistema multimedia.

En ella encontramos todo tipo de información y ajustes del coche, la climatización, el navegador, etc. Si bien es cierto que no somos defensores de que todo se realice a través de una pantalla sin tener botones físicos, Smart ha colocado unos atajos en la parte inferior de la pantalla que nos llevan directamente a distintos elementos esenciales, como los ajustes del coche, los modos de conducción o la luneta térmica y el botón de desempañar el cristal delantero. En la parte baja de la pantalla táctil, siempre tenemos la climatización a la vista, para un rápido ajuste.

El diseño de la interfaz es muy moderno y animado, con los elementos mostrados en grande y siendo fácilmente accesibles. Nos ha gustado bastante todo el apartado gráfico de Smart, hace que tenga una personalidad propia y aporta un aspecto original y diferente.

En cuanto al espacio interior, Smart ha sabido hacer muy buen uso de su habitáculo, pues tanto en las plazas delanteras como en las traseras, los ocupantes disfrutan de una posición cómoda. La distancia en la segunda fila hasta el respaldo de los asientos delanteros es muy amplia, aunque las piernas no terminan de reposar de manera cómoda en las banquetas, un problema muy típico de los coches eléctricos, pues el suelo está elevado por la colocación de las baterías bajo el mismo, haciendo que la postura de las piernas se eleve y acabe causando más fatiga que en un modelo donde los muslos apoyen completamente sobre el asiento.

Tampoco resulta especialmente generoso su maletero, pues es aquí donde se nota que Smart ha preferido dar más espacio a los ocupantes que a sus equipajes; sólo tiene 370 litros de capacidad, aunque bajo el capó delantero esconde otro pequeño maletero de 15 litros, para guardar los cables de carga, porque no entrará tampoco mucho más.

Mecánicas 100% eléctricas y tracción trasera o total

Mecánicamente, el #3 recurre a propulsiones únicamente eléctricas, como todos los modelos de la nueva Smart, con una gama que se compone de 5 acabados. El nivel de entrada recibe el nombre de #3 Pro, y cuenta con un solo motor en posición trasera con 272 CV de potencia. Asociada a este tenemos una batería de iones de litio de 49 kWh de capacidad, suficiente para que Smart homologue hasta 325 kilómetros de autonomía. Por encima de este encontramos el Pro+, el Premium y el 25th Anniversary Edition, todos ellos con la misma potencia de 272 CV, el mismo motor trasero, pero diferentes autonomías dado que recurren a una batería de mayor tamaño; concretamente de 66 kWh. Gracias a esta, el Pro+ ofrece hasta 435 kilómetros de alcance, mientras que tanto el Premium como el 25th Anniversary Edition, alcanzan los 455.

Para terminar, la variante más deportiva está firmada por Brabus, y consta de dos motores, uno por eje, tracción total y una potencia combinada de nada menos que 428 CV. Gracias a esto, el #3 Brabus es capaz de cubrir el 0 a 100 km/h en sólo 3,7 segundos, mientras que las otras variantes lo hacen en 5,8. La autonomía, por su parte, se queda en 415 kilómetros (batería de 66 kWh).

Ahora bien, cuando la batería se agote, el #3 apuesta por la recarga rápida de hasta 150 kW (130 kW para el Pro de acceso), lo que hace que pueda pasar del 0 al 80% de su capacidad en tan solo 30 minutos.

Nos ponemos al volante por Mallorca

Cuando llegó el momento de ponernos a los mandos del nuevo #3, en 20Minutos tuvimos la fortuna de que nos tocase la variante más prestacional de todas, la versión Brabus de 428 CV. Lo sorprendente de este modelo es que, a pesar de ser el modelo más radical, nos pareció un coche cómodo y con un confort de marcha sorprendente. Es cierto que va algo más duro de suspensión, pero aún así resulta muy cómodo para el día, además de que pisa realmente bien en curva. Sus distintos modos de conducción permiten jugar un poco con la cantidad de agresividad que queremos tener bajo el pie derecho, porque el #3 Brabus corre, y mucho. La violencia con la que acelera y la capacidad de empuje que tiene son impresionantes, hasta el punto de llegar a marear en un abrir y cerrar de ojos a tu acompañante si no va completamente centrado en mirar al frente. La frenada también es sobresaliente, y aunque el coche se siente algo pesado en determinadas situaciones, Smart ha sabido esconderlo realmente bien.

El confort interior y, sobre todo, la calidad y terminación de todo su habitáculo son dos cosas que sorprenden. Y no sorprende porque venga de China, sorprende porque a pesar de ser mitad Mercedes-Benz, la sensación es que está mejor hecho que muchos modelos de la estrella, al menos que los que se acercan a su precio (no es oficial, pero en España se moverá entre los 43.000 y los 50.000 euros). También nos pareció eficiente, pues a pesar de que la ruta fue por las serpenteantes carreteras de montaña de la sierra Tramontana, y de que conducíamos la variante más deportiva del #3, logramos una media de 20 kWh/100 km, cerca de la oficial de 17 kWh/100 km.

En definitiva, el Smart #3 llega para presentar batalla en el segmento más vendido en Europa, con un diseño minimalista pero muy cuidado, un espacio interior más que destacado, cinco niveles de acabado, potencias variadas, autonomías correctas y unos acabados, tanto exteriores como interiores, que hablan por sí mismos; se respira calidad por los cuatro costados. A esto se suman las últimas tecnologías, capacidad de carga rápida y colores muy distintos para personalizar el coche. En contra, el maletero es bastante escaso para un modelo de este tamaño; y el precio, que echará para atrás a más de uno.


Source: Coches

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por admin