Mar. Abr 30th, 2024

La acción de llenar el depósito de gasolina en las distintas estaciones de servicio repartidas por España suele ser, en condiciones normales, un hecho bastante sencillo y rápido de ejecutar. No obstante, esta maniobra también tiene un ‘lado oscuro’ que podría poner en serios aprietos a nuestro ‘amigo de cuatro ruedas’.

En una gran parte de casos, los usuarios insisten en seguir suministrando carburante a pesar de que la pistola de la manguera del surtidor realice el típico sonido ‘clack’ alertando que el depósito está totalmente lleno y completo. Esta acción es más grave de lo que realmente pensamos, por lo que es recomendable no seguir con el suministro una vez rebasada la línea máxima de carburante.

¿Cómo funciona la pistola de la manguera de carburante?

El boquerel, tal y como se llama la pistola de la manguera, es una pieza muy sensible que está diseñada, única y exclusivamente, para verter combustible a la vez que evacúa aire y los diferentes gases que se encuentran dentro del depósito.

Asimismo, los usuarios deben saber que la retirada del aire y gases del depósito es una acción importante para evitar posibles fallos mecánicos, por lo que el cañón de la pistola del surtidor será la encargada de realizar la maniobra, además de llenar al mismo tiempo el depósito de combustible.

¿Por qué hay casos que suena el ‘clack’?

Existen dos explicaciones lógicas de por qué la pistola hace ‘clack’ en estos diferentes momentos. La primera es debido al suministro veloz o demasiado rápido del depósito. Esta acción implicará que no se está realizando correctamente la salida de aire, por lo que la manguera dejará de servir.

Por otro lado, y en situaciones menos habituales, el boquerel dejará de suministrar combustible si está sumergido en el propio carburante, es decir, si hemos sobrepasado el límite de litros que permite almacenar nuestro depósito. Dicha acción se interrumpe de nuevo por la nula salida del aire de la manguera.

¿Es peligroso sobrellenar el depósito?

Esta es una de las grandes preguntas que se hacen distintos usuarios de nuestro país. Pues bien, sí es peligroso y, además, es una pérdida de dinero. Si el propio depósito detecta que lo estamos llenando por encima de sus posibilidades, abrirá una válvula de seguridad y tirará parte del suministro al suelo. Asimismo, esta acción podría tener cierto peligro para la carrocería del vehículo, puesto que deterioraría la pintura.

Por otro lado, debemos de tener en cuenta que los depósitos tienen que contar con cierto volumen de seguridad reservado, exclusivamente, para los gases que genera el propio combustible cuando se traslada. Si reducimos el espacio con más carburante, podría dañarse la válvula de evacuación de gases y correría cierto peligro de que el olor a gasolina llegue hasta el habitáculo del automóvil.


Source: Coches

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por admin

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