En el momento que decidimos comprar un coche nuevo, se abre una oportunidad de oro para darle nuestro toque más personal. No obstante, todo aquel usuario que modifique e implante cualquier tipo de cambio mayúsculo en su vehículo deberá pasar por la Inspección Técnica de Vehículos para lograr la verificación y poder circular sin ningún problema.
Cuando hablamos de extras, el propio fabricante nos brinda la oportunidad de elegir el color que más nos guste dentro de su gama, cambiar las llantas por unas de aspecto más deportivo, elegir si queremos pantalla solar, añadir una mejora de faros LED o Xenón, entre otros. Sin embargo, en alguna ocasión suelen existir clientes y empresas que van más allá de lo normal y hacen variaciones atípicas para un simple turismo.
Una cafetera y una nevera
La marca italiana FIAT, en asociación con la marca de café Lavazza, incorporó en el habitáculo del Fiat 500L una cafetera de cápsulas. El elemento en cuestión se sitúa entre los dos asientos delanteros y da opción a los pasajeros de preparar un expreso durante sus desplazamientos. No es el único electrodoméstico que utilizó esta marca: dentro de los extras del Fiat Multipla se podía instalar una pequeña nevera (con guantera en la parte de arriba) sustituyendo así el asiento central trasero.
Un inodoro
Se diseñó de forma exclusiva para el ejecutivo estadounidense Joseph Maschuch. En su Rolls-Royce Silver Wraith de 1954, creado por Alfredo Vignale, en la fila trasera de uno de sus asientos se encontraba un inodoro que no tenía sistema de carga, por lo que los desechos se liberaban de forma directa a la carretera.
Sillas de picnic
La marca británica Range Rover incorporó en su versión Autobiography dos sillas de picnic. Aunque este extra puede parecer común, estos utensilios están hechos de cuero Windsor con reposapiés y tienen un precio de 6.000 euros, una cifra muy significativa y elevada. Se colocan en el suelo corredizo del maletero y para utilizarlas hay que montarlas sobre el portón trasero.
Un reloj de lujo y un equipo de cetrería
En 2017, Bentley lanzó el Bentayga Falconry para el SUV que lleva el mismo nombre. En la parte trasera del vehículo se podía encontrar una estación de vuelo con dos perchas, capuchas de cuero para las aves, guantes de piel elaborados a mano y una funda protectora para el suelo del maletero.
Pero este no ha sido el único extra curioso de la firma. Bentley Bentayga cuenta con uno de los extras más caros del mercado: se trata de un reloj Breitling automático de oro macizo mecanizado y ocho diamantes incrustados en la esfera, creado en exclusiva para este modelo de la marca británica. El reloj va ubicado en el salpicadero y tiene un precio de 200.000 euros.
Otros objetos ‘extraños’ para coches
- Tocadiscos
- Escúter
- Un cielo artificial iluminado
- Tienda de campaña para coches
Source: Coches