En España, el número de motoristas que circulan por la red viaria aumenta cada año, con ello, también se eleva la preocupación por este tipo de conductores por parte de la Dirección General de Tráfico, ya que son uno de los colectivos con mayor siniestralidad en las carreteras de nuestro país.
Por otro lado, para evitar riesgos en la conducción, los motoristas utilizan un equipamiento protector de las extremidades, sin embargo, a veces les ocurre que se produce un vaho molesto en el propio casco de la moto, por lo que la visión se vuelve difícil, en esta circunstancia lo mejor es utilizar algunos de los productos que presentaremos a continuación.
¿Qué productos quitan el vaho del casco?
En primer lugar, existe una lámina que se coloca en el interior de la visera, conocida como ‘pinlock’, que permite crear una cámara de aire que evita que se empañe el cristal. Por otra parte, existen productos más específicos a la hora de retirar el vaho del casco. Uno de ellos es el Liqui Moly que tiene buenas valoraciones en Amazon.
Además, es preciso mantener el casco lo más limpio posible con el fin de evitar que se empañe el cristal, también resulta recomendable que este elemento de seguridad esencial no se encuentre en contraste con cambios bruscos de temperatura.
¿Cómo es posible conocer si el casco de moto está ajustado?
Para ello, lo mejor es utilizar el método japonés que llama la atención por su simplicidad, ya que solo requiere colocarnos el casco en la cabeza y posicionarnos frente a un espejo. Primero, es fundamental alinear el casco de forma que quede centrado con respecto a nuestras cejas y nariz.
Luego, debemos verificar el espacio entre las cejas y la parte superior del casco. Este espacio debe permitir que entre un dedo; si hay demasiado espacio o el dedo no cabe, esto indica que el casco no está correctamente ajustado.
¿Cuándo fue obligatorio el casco de moto en España?
En nuestro país el uso de este elemento de seguridad, que está ampliamente comprobado que salva muchas vidas, se convirtió en obligatorio en el año 1982 para las motocicletas de más de 125 centímetros cúbicos.
Sin embargo, no fue hasta el 1 de septiembre de 1992 cuando se hizo obligatorio que los conductores de ciclomotores y motocicletas de menos de 125 cc usaran casco, tras una modificación en el Reglamento General de Circulación. Hoy en día, conducir sin casco conlleva una multa de 200 euros y la pérdida de cuatro puntos del carnet de conducir.
Source: Coches