Para los conductores en España, unas de las peores jornadas al volante son en las que la lluvia es la protagonista. La conducción es muy diferente durante esos días, puesto que se debe tener una precaución especial por el agua que se acumula en las vías. El problema no solo es ese, sino que en algunos automóviles que tienen ya muchos años a su espalda, puede que entre agua y que se genere humedad, moho o óxido a largo plazo.
Desde Real Automóvil Club de España (RACE) explican que «si se mete agua dentro del coche se debe, en la mayoría de las ocasiones, a fallos de elementos que necesitan una revisión cada cierto tiempo». Estos elementos que se pueden deteriorar son encargados de repeler el agua para no entre en el interior del vehículo.
Los elementos que impiden el paso de agua al interior del coche
Las juntas de las puertas y las ventanas suelen estar hechas de goma. Es decir, es un material que con el paso del tiempo se agrieta o cuartea. También se puede desgastar o desajustarse. En el momento en el que observemos que las juntas están rígidas o agrietadas tendríamos que cambiarlas por unas piezas nuevas.
Por otro lado, los desagües y canalizaciones obstruidos. RACE explica que si «dejas que tu coche vaya acumulando ramas, hojas y otro tipo de suciedad, las canalizaciones que conducen el agua hacia el exterior se pueden bloquear por lo que el líquido no evacuará hacia donde debe». Y es justo ahí cuando el agua de la lluvia puede colarse cuando el coche en circulación.
El sellado del parabrisas también es importante. Es un cristal que suele ir pegado y sellado para evitar que entre el agua. El problema es que con el paso del tiempo puede perder la adherencia. En este caso, tendrá que llevarse al taller. Algo similar ocurre con el sellado del techo solar. Con el calor del sol en verano sus juntas se secan y agrietan. Esto puede provocar que en la época de lluvias se empiece a colar el agua por ellas.
A pesar de que la parte inferior de los coches, es decir, los bajos del vehículo, está pensada para que aguante, su estructura o chasis puede sufrir daños, especialmente si se circula por zonas de piedra o tierra. «Esto va a provocar que se generen pequeños huecos por los que se puede colar el agua hasta el interior del vehículo», afirma RACE.
¿Cuál es la mejor forma de prevenir para no entre el agua en el coche en los días de lluvia? RACE dice que lo más importante «es revisar todas las piezas antes mencionadas, que son las encargadas de evitar que el agua llegue hasta el interior del coche». Esto quiere decir que lo mejor es la prevención porque si no existe una supervisión el conductor no va a ser consciente de un desgaste o rotura.
«Más allá de que un mecánico haga la inspección visual de estas piezas cuando hace el mantenimiento del coche, tú mismo puedes revisar en qué estado están las juntas, los desagües y las piezas de goma de puertas, ventanas, parabrisas…» afirma RACE. Y añade: un buen momento para hacerlo es cuando se lava el coche.
Source: Coches