20MINUTOS.ES / AGENCIAS
- El Parlamento Europeo aprobará esta normativa en seguridad vial en un pleno este martes.
- La DGT propuso el año pasado estos limitadores de velocidad obligatorios para reducir la siniestralidad.
El Parlamento Europeo prevé aprobar de manera definitiva en un pleno este martes la directiva que obligará a todos los vehículos vendidos a partir de 2022 en la UE a llevar instalados asistentes de velocidad inteligentes y sistemas avanzados de frenado de emergencia.
Esta normativa, previamente acordada con los ministros de los Estados miembros, atañe a todos los coches, furgonetas, camiones y autobuses nuevos. No obstante, por ahora el conductor tendrá la opción de desactivar esta función implementada en su vehículo y se desconoce cuándo será de uso obligatorio.
Asimismo, la UE también ha detallado que a partir de ese año los vehículos deberán estar equipados además con mecanismos de frenado inteligente, sistemas avanzados de advertencia por distracción, de mantenimiento de carril, de detección de marcha atrás, interfaz para la instalación de alcoholímetros antiarranque, señal de frenado de emergencia, y un registrador de datos de accidentes (caja negra).
Según ha explicado el Parlamento esta semana en un comunicado, se calcula que el asistente inteligente de velocidad podría reducir las muertes en carretera en un 20%. Según los datos preliminares de la Comisión Europea, en 2018 murieron más de 25.000 personas en las carreteras europeas y 135.000 resultaron heridas graves.
Qué son los asistentes de velocidad
Se trata de un sistema capaz de leer las señales de tráfico y, una vez activado, ajustar automáticamente la velocidad del vehículo al límite establecido.
En palabras del director de Prevención y Seguridad Vial de la Fundación Mapfre, Jesús Monclús, si todos los coches en España estuviesen equipado con este sistema habría unos 400 fallecidos menos al año en accidentes de tráfico, «de ahí lo alto de su efectividad».
A diferencia de otro tipo de sistemas de ayuda a la conducción, esta estimación sobre la reducción de fallecidos se aplica a todo tipo de accidentes de tráfico, mientras que otros asistentes, como el control adaptativo y la distancia de seguridad con respecto al vehículo que circula delante, evita solo los alcances entre automóviles.
El año pasado, la DGT ya se mostraba a favor de instalar obligatoriamente estos limitadores de velocidad en los vehículos para reducir así las cifras de siniestralidad.
Tal y como explicaron entonces desde Bosch España, este sistema es una combinación entre el crucero de control adaptativo y el reconocimiento de señales. A través de una cámara de vídeo, el vehículo es capaz de leer las señales de tráfico, mientras que el sensor de radar detecta los vehículos que están delante.
Algunas marcas han empezado ya a incorporar este sistema. Por ejemplo, Ford lleva montando este asistente desde hace tres años en los modelos Mondeo, S-Max y Galaxy. Ahora le toca el turno a la nueva generación del Focus.
Mercedes-Benz también lo ofrece en las gamas Clase A, Clase C (berlina, Estate, coupé y cabrio), Clase E (berlina, Estate, coupé y cabrio), Clase S (berlina, coupé y cabrio) y CLS.
También existen otros mecanismos similares, como el que equipa el nuevo Fiat 500X; en este caso, el vehículo incluye un sistema de reconocimiento de señales y un avisador de velocidad, que permite mediante la pulsación de un botón (no de forma automática) adaptar la velocidad de desplazamiento a las señales leídas a lo largo del recorrido.
Source: Coches