Durante estos más de dos meses hay que admitir que las costumbres de los compradores españoles han cambiado y que Internet se ha posicionado como el canal predilecto para adquirir nuevos bienes y servicios, de eso no cabe ninguna duda. Y pese a la apertura de los comercios físicos, no se prevé que está tendencia cambie.
Pero, frente al 64% de los compradores que afirman que durante toda esta crisis han aumentado o van a aumentar sus compras online, se encuentra el polo completamente opuesto de quien es conductor. El 90% de los españoles afirma que no compraría un coche o moto por internet.
Los concesionarios y los fabricantes también han intentado, durante estos meses, mantener sus ventas a través de los canales online habituales incluso ofreciendo ofertas personalizadas o visitas virtuales para poder inspeccionar los diferentes modelos de vehículos. Pero al parecer, esto no ha sido suficiente para el comprador medio.
Según las conclusiones que lanza esta encuesta realizada por Cetelem, el canal online no inspira suficiente confianza a los compradores para adquirir bienes tan costosos como un coche o una moto. Lo más comprado pasa por los viajes, la informática, la telefonía y los libros pero, obviamente, los conductores no están dispuestos a financiar una inversión que supera los 15.000 euros sin a ver visto primero el producto.
Es, además, muy importante en el proceso de compra de un vehículo poder verlo y probarlo, para saber que lo que nos estamos llevando a casa es justo lo que queremos a necesitamos, ya que se espera que cómo mínimo un coche nos acompañe durante 10 años.
Así, mientras que solo el 10% de los que apuestan por los coches lo comprarían online, los motoristas son mucho más exigentes y solo un 8% se atreverían a adquirir una motocicleta online.
Source: Coches
