Durante los meses de marzo, abril, mayo y junio el total de accidentes de tráfico con resultado mortal bajó casi a la mitad en comparación con las estadísticas del año pasado. Las restricciones a la movilidad impuestas en el marco del estado de alarma dieron sus frutos en este sentido. Pero, al contrario de lo que podría haber sido una tendencia que aprovechar en cuanto a seguridad vial, las cifras totales de estos últimos meses ya van recuperando los números habituales.
El mes de julio, en el que ya reinaba la nueva normalidad, rompió las estadísticas al acumular un total de 105 accidentes mortales, incluso uno más que el año anterior. Fueron 114 víctimas las que fallecieron en esos siniestros, 3 menos que en el mismo mes del 2019.
En estos dos últimos meses, se han mantenido los niveles de accidentalidad del 2019, de manera provisional y según los datos que actualiza la Dirección General de Tráfico relativos a las vías irterurbanas. En septiembre se registraron 95 incidentes con resultado fatal (en comparación con los 92 del 2019) y el mes de octubre se ha cerrado con 91 (dos menos que el año pasado). Y, en los apenas cuatro días que llevan noviembre, ya se ha tenido constancia de al menos tres accidentes de tráfico con 4 víctimas mortales.
Si bien es cierto que el acumulado provisional del año sigue siendo más bajo que el del pasado 2019, en parte por la limitación a los del desplazamientos de los meses del estado de alarma, esta recuperación tan rápida de la siniestralidad habitual es preocupante y aleja la consecución de los objetivos planteados por la DGT en lo que a seguridad vial se refiere. Además, durante los próximos meses en los que las horas de luz disminuyen y aumentan los factores climáticos que afectan a la conducción (como la lluvia o la nieve), por lo que también crecerán las probabilidades de sufrir un accidente en carretera.
Source: Coches