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- Una buena planificación es esencial para evitar los días y horas con mayor afluencia de coches.
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Seguro que alguna vez te has visto envuelto en un atasco, sobre todo, en estas fechas en las que millones de personas utilizan sus coches para disfrutar de las ansiadas vacaciones de verano. De hecho, una de las razones por las que se producen las retenciones es por la capacidad máxima de vehículos que admiten las vías.
Desde la DGT dan las claves para sortear la congestión:
- Planificación: hay que intentar evitar los días y horas con mayor afluencia de coches. Para ello, la DGT cuenta con unas previsiones para los días clave de las Operaciones salidas y Retorno del verano que ha detallado en una infografía, para que el usuario pueda ajustar y elegir el momento en el que se prevea menor índice de circulación.
- Señalización: cuando hay un accidente o se produce una avería del coche en la carretera es muy importante señalizarlo con los triángulos y retirar el coche al arcén. Esto no solo reduce la retención, sino que además evita peligro y nuevos accidentes.
- Efecto cremallera: es una de las claves para llevar mejor los atascos cuando se produce un estrechamiento de carril. Consiste en el paso intermitente y alternativo de un vehículo de cada carril. Según la Guardia Civil, «si todos los conductores aplicáramos esta técnica, la fluidez del tráfico mejoraría».
- Evitar el efeto mirón: en muchas ocasiones, cuando hay un atasco o un accidente se produce también una retención adicional incluso en el sentido contrario donde se ha producido el siniestro. Esto es debido al efecto mirón, los conductores disminuyen la velocidad para mirar qué es lo que ha sucedido y se generan retenciones.
- No conducir de manera agresiva: frenazos, aceleraciones, cambios de carril… conducir de una manera agresiva origina el famoso efecto acordeón, caídas bruscas de la velocidad de circulación. La caravana de coches comienza a crecer rápidamente y la descongestión de la vía se produce de una manera mucho más lenta. Es muy importante guardar la distancia de seguridad para que nos de tiempo a frenar en caso de que se vuelva a detener el tráfico de repente. Circular a una velocidad inferior pero constante hace que el conjunto de coches avance más rápido que acelerando y frenando bruscamente.
Source: Coches