Durante el pasado 12 de diciembre del 2023, representantes de casi 200 países, incluido España, debatieron acerca del futuro climático en la Cumbre del Clima en Dubai y las posibles soluciones energéticas compatibles con la supervivencia y mejora del planeta.
En este escenario, varios países aprobaron la eliminación de las subvenciones para los combustibles fósiles, tal y como anunció Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Austria, Bélgica, Canadá, España, Costa Rica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Irlanda, Países Bajos y Luxemburgo, fueron los 11 países que dieron el primer paso hacia un futuro más ecológico y saludable.
¿Cuándo finalizará la ayuda para los combustibles fósiles?
En condiciones normales, la eliminación de las ayudas públicas a cualquier tipo de combustible con origen fósil, es decir, la gasolina, diésel, gas o carbón, se producirá antes del año 2030. Una fecha que coincide, de forma aproximada y según indica la Ley 7/2021, con el fin de la comercialización en nuestro país de los vehículos con motor de combustión, fijada en un primer momento para el 2040 y adelantada por el Parlamento Europeo para el 2035.
No obstante, esta fecha será el fin de la comercialización, no de la desaparición de estos coches de las carreteras europeas. Los vehículos con motores diésel y gasolina podrán seguir circulando hasta el año 2050. Eso sí, tendrán restricciones que impondrá la Unión Europea.
¿Qué consecuencias puede tener la eliminación de subvenciones?
España sería uno de los países más ‘afectados’ tras la firma de este acuerdo, sobre todo las empresas del sector primario: agricultura, pesca, ganadería o minería, entre otros. La eliminación de las subvenciones a los combustibles fósiles ha sentado como un verdadero jarro de agua fría en este sector.
La futura eliminación del gasóleo B es una de las principales preocupaciones en el mundo agrícola. Este combustible, actualmente, tiene un coste de 30 céntimos por litro por estar subvencionado. Con la supresión de las ayudas, los usuarios, además, ya no recibirán la devolución parcial de impuestos en función de la cantidad fija anual que suelen gastar al cabo del año. Dicha medida era una de las claves por la que este sector sobrevivía a la constante variación en el precio de los carburantes, que incluso llegaron a superar los 2 euros por litro repostado hace unos meses.
¿Posible solución?
La llegada de los combustibles sintéticos puede ser una alternativa para alargar la vida de los motores de combustión. Gracias al desarrollo y comercialización de estos nuevos carburantes, la desaparición de la gasolina y el diésel puede que no sea tan inmediata como parece.
Durante este pasado marzo del 2023, la Comisión Europea reconoció como una opción «totalmente válida» el uso de los nuevos combustibles en coches con motores de combustión, por lo que este tipo de modelos se podrán seguir comercializando a partir del 2035.
Estos carburantes se crean utilizando todo tipo de energías renovables o reciclando materiales orgánicos, como puede ser el caso de aceites comestibles, desechos de la agroindustria, biomasa o residuos forestales. Además, no contribuyen a aumentar la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera.
Source: Coches
