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La mayoría de los conductores buscamos reducir el consumo de combustible en nuestros desplazamientos, bien sea por la concienciación sobre el medio ambiente o por ahorrar algo de dinero debido al precio del combustible. Hace tiempo que las grandes marcas de la industria del motor se dieron cuenta de esta tendencia y, por eso, los coches actuales consumen menos que los fabricados hace unos años.
¿Cómo han logrado esta mejora el sector? A través de una combinación de varios factores, la tecnología actual permite que los motores sean de menor tamaño, además, cuentan con un sistema de combustión más eficiente y una carrocería más ligera.
Sin embargo, si realmente estamos interesados en ahorrar gasolina, hemos de ser conscientes de que la tecnología no es la única responsable de lo que consume nuestro coche. La conducta al volante del conductor es un factor que también influye a la hora de repostar más o menos a menudo durante un viaje. ¿Qué podemos hacer para disminuir el consumo de combustible? te dejamos algunos consejos.
1.- Planificar el viaje.
Actualmente a través del móvil es posible calcular la mejor ruta para llegar al destino. No solo la más corta, hay que tener en cuenta también el tipo de vía, la velocidad que se puede alcanzar, si hay más o menos probabilidades de atasco… todo esto son factores que afectan al consumo del coche.
2.- Rebajar la carga
Si llevamos más “por si acasos” lo que estamos haciendo es cargar más el coche y, cuando más incrementemos el peso que debe llevar el vehículo, más aumentará el esfuerzo que el motor debe realizar y más consumiremos. Si resulta imposible viajar ligero de equipaje, consumirá menos si lo distribuimos equitativamente por el coche que si lo concentramos en un solo punto.
3.- Cuidado al pisar el acelerador.
Durante el viaje es mejor evitar los acelerones que, además de aumentar el consumo de combustible del coche, pueden provocar accidentes. Es mejor para el motor que mantengas una velocidad sostenida.
Los frenazos, aceleraciones y cambios de marcha siempre implican un pequeño uso extra de combustible. Por eso, siempre que te resulte posible durante la conducción, frena levantando el pie del acelerador, pisando muy suavemente el pedal del freno y aguantando el momento de reducir la marcha al máximo posible. Esto no quiere decir que arriesguemos una conducción segura. Si estamos en un descenso o situación de peligro, no hay que dudar en pisar el freno.
Además, mientras circulas a una velocidad sostenida, es mejor utilizar las marchas largas y mantener el coche a bajas revoluciones. Eso sí, siempre priorizando tú seguridad.
4.- Apaga el motor si no estás en marcha
Hay coches que incorporan esta medida de serie y el motor se apaga automáticamente cuando está parado y arranca al pisar el embrague. Si el tuyo no es uno de ellos, recuerda que puedes hacerlo de forma manual, ya que en ralentí el coche consume de media 0,13L/Km.
5.- No abuses del aire acondicionado ni la calefacción
Igual que en el hogar, el consumo extra que nos obliga a hacer el tener la temperatura bajo control nos compromete a usarlo de forma responsable. En cuanto sea posible, es mejor bajar las ventanillas para acondicionar la temperatura del interior del vehículo que usar el aire.
6.- Cuida tu coche
Todos los detalles ayudan a ahorrar un poco de combustible y es el conjunto de todo lo que supone una diferencia sensible. Por eso, también es importante el mantenimiento general del coche: desde los neumáticos hasta los filtros, pasando por lubricantes y líquidos.
Source: Coches