GUILLE LLOPIS
- La compañía publica en su página web ofertas de trabajo en Madrid y Barcelona a la espera de hacer público dónde instalará su sede española.
- Los coches que se encarguen ahora no podrán ser entregados hasta 2018 debido al volumen de trabajo de la compañía.
- Tesla trabaja a expensas de que la regulación se adapte a las tecnologías que están creando, tanto en automoción como en consumo eléctrico.
- Tesla alcanza el nivel 5: sus coches serán 100% autónomos.
Tesla vive un proceso de expansión constante. Con la gigafactoría que tenían en construcción ya inaugurada, la compañía que dirige Elon Musk está tejiendo la red que le permita asaltar el mercado de uno de los países de Europa en los que todavía no tiene presencia: España. Ni los accidentes ni sus proyectos paralelos (como el de colonizar Marte) distraen a Musk de su intención de cambiar la movilidad a nivel mundial.
Ahora, en plena producción de su nuevo Model 3 y con el reciente anuncio de su nuevo sistema de conducción 100% autónoma, la compañía busca también establecer sus estructuras en mercados que no controla. Con cuarteles generales ya repartidos por todo el centro y el norte de Europa, España encabeza la expansión de la zona meriodional del viejo continente. El primer paso, tal y como confirman a 20MINUTOS.ES dirigentes de Tesla en Europa, va a ser la búsqueda y contratación de talento local con conocimiento del sector y el mercado para poder tener su propia organización lista en España en 2017.
Concretamente, Tesla tiene publicadas en su página web nueve ofertas de trabajo para iniciar su implantación en España. Pese a que desde la compañía no confirman los rumores que sitúan su sede española en Barcelona, el reparto de las ofertas de trabajo da a entender que será así: los técnicos de comunicaciones, recursos humanos o ingeniería solicitados son para la Ciudad Condal, mientras que las dos únicas ofertas para Madrid son de ventas. Además, y aunque ahora la red es más extensa (actualmente hay seis estaciones con 28 puntos de carga en total), los dos primeros superchargers de Tesla en España se instalaron en Cataluña.
La expansión, de hecho, va a ser paralela en España y en Portugal. Al igual que ya realizan muchas grandes compañías, algunos de los puestos clave de la nueva estructura de Tesla tendrán responsabilidades en toda la península ibérica, aunque el volumen de pedidos no les permitirá entregar los primeros vehículos (ya encargados) hasta finales de 2017, y quienes lo encarguen ahora lo recibirán en 2018.
A expensas de la regulación
Una de las grandes incógnitas respecto al momento en que Tesla deje de ser un cúmulo de proyectos y se cristalice como una realidad fuera de Estados Unidos es de qué manera va a poder adaptarse a las leyes. Por el momento, al menos en España, están encontrándose trabas: el Ministerio de Industria tiene previsto crear un impuesto para gravar el autoconsumo, lo que implicaría directamente al sistema de almacenamiento de energía y baterías de los Powerwall de Tesla.
Los sistemas de acumulación de energía, a través de paneles solares, son según la compañía «idóneos» para implantarse en España por su buen tiempo y gran cantidad de horas de sol en buena parte del país. De hecho, el responsable del mercado europeo de la compañía liderada por Musk mostró hace unos meses su esperanza de que por una parte el crecimiento de la asimilación de estos avances y, por otra, un posible cambio en el gobierno, acelerasen la regulación de los sistemas de autoconsumo eléctrico.
Tampoco está contemplada en las normativas de circulación españolas la posibilidad de desplazarse en un vehículo con piloto automático. En cualquier caso, desde la compañía aseguran que eso «no puede condicionar» su trabajo, y que se adaptarán conforme la situación lo requiera, pero sin frenar el avance de sus tecnologías. Desde la compañía, a la espera la formación de un gobierno y de qué medidas adopta en estas materias, prefieren no valorar «hipótesis» hasta que no se confirmen.
Source: Coches