Audi tiene una larga tradición en impartir cursos de conducción y perfeccionamiento. Lo llevan haciendo desde hace mucho tiempo en todas las partes del mundo y nosotros solo os podemos decir que suponen una experiencia única. Y no solo por los coches que se utilizan, sino también por la importante labor de formación que hacen sus expertos equipos de monitores para enseñar a los alumnos las mejores técnicas de conducción que, trasladadas a la práctica en el día a día, nos pueden evitar muchos sustos.
En esta ocasión, la caravana de la marca alemana se trasladó al circuito del Jarama donde pudimos participar de forma activa en uno de estos cursos precisamente en el más extremo, en el “Sportscar” para disfrutar a bordo de sus dos buques insignia en materia de prestaciones y deportividad como son el R8 V10 (620 CV) y el no menos espectacular e-tron GT en su versión RS (598 CV).
Dos menús de «cinco estrellas» y unos aliados perfectos para saborear las sensaciones que aporta la tecnología de propulsión eléctrica y establecer comparaciones con los motores térmicos de toda la vida. De aperitivo, además de un briefing de lo más enriquecedor, una prueba de aceleración en la propia recta de meta del trazado madrileño conduciendo el e-tron GT.
Si bien ya habíamos tenido la oportunidad de conducirlo en carretera abierta, donde nos dejo con la boca abierta, el espectáculo de este modelo en el circuito a la hora de robarle segundos al crono es simple y llanamente de otro mundo. Y es que te deja literalmente pegado al asiento con ese silencio tan particular e inusual.
El siguiente plato de este menú de “autor” era subirse en el R8 y ensayar una frenada con esquiva. Vuelta a lo convencional con un motor térmico V10 excepcional que también fue capaz de robarnos unas cuantas sonrisas. Había que acelerar a tope y frenar a fondo para comprobar las bondades de este modelo y su extraordinaria capacidad dinámica.
De todos modos, lo mejor estaba por llegar. Hablamos del “postre”, de rodar en el circuito completo con semejantes bólidos. Con el R8 ya lo habíamos hecho en múltiples ocasiones, pero con el e-tron GT iba a ser nuestro bautismo «electrificado» en pista.
Manos a la obra con el eléctrico y sorpresa tras sorpresa. No solo por su manera tan salvaje de correr, sino igualmente por su aplomo y forma de sujetarse en el paso por curva. Es cierto que el peso se nota, hablamos de más de 2,5 toneladas, pero hasta eso pasa a un segundo plano cuando comprobamos su eficacia y, de igual modo, como debe estar devorando los neumáticos con tanta potencia y capacidad de aceleración.
Del e-tron GT pasamos al R8, un viejo conocido que iba a ser la prueba del algodón definitiva. Después de cuatro vueltas, el biplaza alemán nos hizo vibrar y mucho. Sabíamos de sus atributos y, si bien el eléctrico nos dejo impresionados, os tenemos que decir que el rugido del V10 o la gasolina tal vez a día de hoy, y en estas situaciones tan extremas, siguen teniendo todas las de ganar. Un 10 para el R8, pero mentiríamos si no le diéramos otro al e-tron GT. Son dos mundos, dos formas muy diferentes de expresarse, pero igual de excitantes para disfrutar de la hiperdeportividad.
La verdad es que fue una jornada apasionante, perfectamente organizada y ambientada, para que desde aquí nuestra recomendación sea absoluta. El Audi Driving Experience ya ha pasado por los circuitos del Jarama y de Barcelona, pero aún quedan oportunidades.
Del 23 al 25 de septiembre, la escuela de conducción de Audi se traslada a Ascari (Málaga), donde se impartirán los cursos Performance, ideales para los que buscan familiarizarse con las técnicas de conducción que permiten sacar el máximo partido a las prestaciones de su vehículo. En breve también se pondrán a disposición de aficionados y clientes los cursos Progressive, que tendrán lugar en el Circuito de Los Arcos (Navarra) los días 14 y 15 de octubre.
Para concluir apuntar que el objetivo de estos cursos es que los participantes se habitúen a la conducción y al comportamiento del vehículo en circuito, mejorando sus habilidades mediante el aprendizaje del arte de la anticipación y el desarrollo de la técnica necesaria para controlar un vehículo de altas prestaciones.
Como dosificar la frenada, controlar la trayectoria ante un imprevisto o seleccionar la mejor trazada y optimizar el agarre de los neumáticos son algunas de las explicaciones que los monitores profesionales de la escuela de conducción de Audi imparten durante las clases teóricas antes de pasar a práctica.
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Source: Coches
