Lun. Dic 30th, 2024

En un coche con caja automática, los cambios de marcha los lleva a cabo el sistema de trasmisión, mientras que uno manual, es el propio conductor quien controla las distintas velocidades mediante una palanca de cambios, este último tipo está presente en buena parte de los vehículos que circulan por España.

Por otra parte, los coches con caja de cambios automática se caracterizan por permitir cambiar de marchas sin necesidad de pisar el embrague, ya que no disponen de esta pieza. Además, suelen contar con una palanca en la que aparecen varias letras que hacen referencia a cada una de las funciones de la conducción, es decir, marcha adelante, atrás o el punto muerto, entre otras.

¿Cuál es el significado de la N en un coche automático?

En este caso la letra N hace referencia al punto muerto, también se le conoce como neutral, es decir, cumple con la misma función que el punto muerto del cambio manual. Además, existen otras letras típicas en la palanca automática, como la P o de parking, que se activa cuando pulsamos el freno de mano eléctrico; la R o reverse, que hace referencia a la marcha atrás; y, por último, la D o Drive, que es la marcha adelante.

¿Qué cambio de marchas consume más?

El Real Automóvil Club de España señala que una caja de cambios automática generalmente consume más combustible en comparación con una manual, aunque este aumento suele situarse en torno al 5%.

Sin embargo, es importante destacar que los avances tecnológicos en las transmisiones automáticas han reducido el consumo de gasolina o diésel en comparación con las manuales. En el pasado, la diferencia de consumo entre ambas era mucho mayor, lo que representaba una desventaja a la hora de comprar coches con cajas de cambios automáticas.

¿Qué más inconvenientes puede tener cambio automático?

Además de un mayor consumo de combustible y que los arreglos mecánicos son más caros en este tipo de trasmisiones, también nos encontramos con que los vehículos con caja de cambios automática suelen tener un valor mayor de venta en el mercado del automóvil español.

Asimismo, los cambios automáticos no permiten llevar a cabo el freno motor, con el que se reduce el uso de las pastillas de freno. Por último, la maniobrabilidad de los coches con trasmisión automática es menos suave y precisa, ya que no se cuenta con el embrague para aparcar.


Source: Coches

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por admin