La conducción autónoma se clasifica en seis niveles (de 0 a 5) en función de la incidencia de la tecnología y de la actuación de quien está a los mandos de un vehículo.
Los tres primeros, del 0 al 2, están ya extendidos en el mercado y en síntesis van desde las alertas de seguridad al conductor, como la de presencia de un vehículo en el ángulo muerto, al control automatizado del vehículo tanto longitudinalmente como transversalmente (control de velocidad adaptativo y de carril, por ejemplo), pero en todo caso siempre bajo la supervisión activa y constante de quien va al volante.
La novedad en el nivel 3 es que el sistema puede actuar sin la supervisión del conductor, pero solo en momentos puntuales, y Mercedes ha llegado a ello con su sistema Drive Pilot. Según la propia marca, esto lo convierte en el primer fabricante de automóviles del mundo que cuenta con una certificación internacional válida para la conducción autónoma condicional, aunque de momento esté limitado al mercado alemán, donde la legislación lo permite (no así en España).
El Drive Pilot de Mercedes permite a los usuarios delegar la conducción al sistema en determinadas condiciones, como en el tráfico denso o en situaciones de congestión en tramos adecuados de autopista y a velocidades de hasta 60 km/h.
Cuando se activa, el sistema controla la velocidad y la distancia, y guía al vehículo dentro de su carril, analizando y teniendo en cuenta el perfil de la ruta, los acontecimientos que se producen en ella y las señales de tráfico.
Por supuesto, Drive Pilot también reacciona ante situaciones de tráfico inesperadas y las gestiona de forma autónoma, por ejemplo, mediante maniobras evasivas dentro del carril o aplicando maniobras de frenado.
Para cumplir el objetivo, la tecnología es muy avanzada, basada en detectores radar, LIDAR y cámaras, añadiendo sensores de ultrasonidos y de humedad que también aportan valiosos datos.
El nuevo sistema Drive Pilot se ofrecerá desde el 17 de mayo en Alemania como opción en los modelos más grandes de Mercedes-Benz, el Clase S y EQS, en el primer caso por 5.000 euros más y en el segundo por 7.430 (precios sin impuestos).
Source: Coches