El uso del cinturón de seguridad en España es obligatorio desde 1975 para los asientos delanteros y desde el 1992 para los traseros, por lo que en caso de no llevarlo puesto incurre en una infracción catalogada por la Dirección General de Tráfico (DGT) como grave.
Muchos estudios han demostrado que el este sistema funciona, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se reduce la posibilidad de deceso en más de un 60% en caso de accidente. Por lo que en nuestro país se podrían haber evitado hasta 150 muertes el año pasado, ya que el 25% de los fallecidos en carretera no llevaba puesto el cinturón de seguridad.
¿Quién paga la multa si no llevas el cinturón?
El Reglamento General de Conducción es muy claro en su artículo 117 que especifica que “el conductor y los ocupantes de los vehículos estarán obligados a utilizar, debidamente abrochados, los cinturones de seguridad homologados, tanto en la circulación por vías urbanas como interurbanas. Esta obligación, en lo que se refiere a los cinturones de seguridad, no será exigible en aquellos vehículos que no los tengan instalados”.
Por lo tanto, en caso de que un ocupante no lleve puesto este sistema de seguridad, la sanción será interpuesta directamente al pasajero, por lo que el conductor no será el responsable de esta circunstancia tan peligrosa, salvo si la persona que incumple la norma es menor edad, en este caso serán los padres quienes abonen la sanción.
¿Cuánto es la multa por no llevar cinturón atrás?
En el caso descrito anteriormente, según las últimas modificaciones de Ley de Tráfico que entró en vigor en el año 2021 se cataloga esta infracción como grave, por lo que lleva acarreada un coste económico de 200 euros.
Por otra parte, en caso de ser el conductor quien prescinda del cinturón de seguridad, a la multa habrá que sumar la consecuente retirada de cuatro puntos del carnet de conducir.
¿Por qué es importante llevar bien ajustado el cinturón de seguridad?
Además de que su eficacia en caso de accidente está completamente demostrada, también es esencial llevar correctamente este sistema de seguridad, ya que en el caso que no lo portemos bien abrochado es fácil sufrir el peligroso efecto submarino.
Esta desagradable situación ocurre el cuerpo del ocupante no se encuentra bien sujeto por el cinturón de seguridad, por lo que se desplaza hacia abajo y se desliza por debajo de la banda abdominal del sistema de sujeción. Por tanto, se generan varios peligros como el riesgo de choque contra el volante o el salpicadero.
Source: Coches