GUILLE LLOPIS
- Su motor eléctrico tiene una potencia de 1.050 caballos y acelera de 0 a 60 millas por hora (algo más de 95 km/h) en 2,39 segundos.
- Puede reservarse con un pago inicial de 5.000 dólares, pero la compañía todavía no ha especificado cuál será el precio final.
- Grandes fortunas chinas como la de Jia Yuenting, con un patrimonio de 3.900 millones de dólares, se han involucrado en la financiación de la compañía.
Con muchas compañías automovilísticas tradicionales poniéndose las pilas para fabricar sus propios modelos eléctricos, el auge de Tesla y los problemas de contaminación marcando la senda de la movilidad del futuro, nuevas compañías y start-ups surgen para dar respuesta a las necesidades generadas. Entre ellas se encuentra Faraday Future: bajo el nombre del que fuese uno de los más destacados científicos de Gran Bretaña, Michael Faraday, el padre de la inducción electromagnética bautiza a unos coches llamados a ser la competencia directa de Tesla.
Un evento por todo lo alto celebrado en Las Vegas sirvió para presentar su primer modelo de producción, el FF91: se trata de un vehículo eléctrico potente, alternativa directa al Tesla Model S y que acelera de 0 a 60 millas por hora (algo más de 95 km/h) en 2,39 segundos, más de una décima por debajo de la versión más poderosa del coche de la compañía de Elon Musk, el S P100D ludicrous.
Hasta 1.050 caballos de potencia puede alcanzar el FF91, cuya fabricación han respaldado inversores de distintas procedencias entre los que se encuentra Jia Yueting, uno de los multimillonarios chinos más poderosos, presente en la lista Forbes con una fortuna de más de 3.900 millones de dólares. El coche tendrá una interfaz personalizada para cada usuario y tratará de ser, según sus creadores, “no un vehículo, sino un ecosistema de movilidad”.
Entregas a partir de 2018
Al igual que hace Tesla con su sistema de compra, los Faraday pueden reservarse con un pago previo. En este caso, el importe de la reserva es de 5.000 euros, y aunque la compañía no ha desvelado cuál será el precio final del vehículo para compradores al por menor, no lo comenzará a entregar hasta 2018 como pronto.
Con Faraday, sus creadores se autoimponen un ambicioso reto: convertir fenómenos como la contaminación, los atascos o los accidentes de tráfico en realidades obsoletas. Es, tal y como afirmaron en la presentación, “reformatear el futuro de la movilidad”. Para ello, implementan en su nuevo FF91 sistemas como la estación de conducción “gravedad cero”, con técnicas inspiradas en la NASA que dan al asiento sensación de confort y ligereza, componentes altamente ergonómicos (el volante recuerda al de un Fórmula 1) y todos los elementos de software y hardware como LIDAR ya presentes en el prototipo FFZERO1.
Pero, además del reto de fabricar en cadena coches de lujo con tecnologías vanguardistas, Faraday se enfrenta a otra problemática: pagar las facturas. Según informa Buzzfeed, la compañía se encuentra en una situación de falta de liquidez alarmante, por lo que la búsqueda de inversores y ‘business angels’ es incesante. Todo para poder responder a la demanda y consolidarse como una de las compañías que rivalizará con Tesla en el panorama de los coches eléctricos.
Source: Coches