Con el paso del tiempo, España y el resto del mundo está presenciando un cambio tecnológico tremendo con la aparición de nuevas técnicas y prácticas en todos los ámbitos de la vida, y en el mundo del motor no iba a ser menos. Hace años, el modelo Koenigsegg Agera RS consiguió el récord de velocidad alcanzando la impresionante cifra de 444,6 kilómetros por hora, algo que, en un primer momento, parecía insuperable.
No obstante, y haciendo referencia al crecimiento tecnológico, esta cifra lograda por el Koenigsegg Agera RS ha quedado atrás. El nuevo Bugatti Chiron ha roto todos los pronósticos y ha logrado alcanzar una marca que roza los 500 kilómetros por hora: 490,484 para ser más exactos. Este impresionante dato lo corona como el coche más rápido del mundo, recuperando su trono perdido hace unos años.
¿Cómo se fabricó el coche más rápido del mundo?
La compañía Bugatti, que ha estado trabajando en este proyecto más de seis meses, ha roto la impresionante cifra de las 300 millas por hora, un dato alcanzado gracias a la colaboración de Dallara (ayudó a fabricar el chasis) y Michelín, empresa encargada en realizar unos neumáticos que no se desintegraran al alcanzar los 500 kilómetros por hora.
La base de este Chiron es bastante especial y sus cambios han sido realizados con el fin de alcanzar este récord del mundo: cuenta con un kit de carrocería específico que amplía el tamaño de las tomas de aire delanteras, es una versión más larga de lo normal, posee un alerón y aerofreno fijo y, por último, tiene un escape doble de orientación vertical.
Parte técnica del vehículo
El nuevo Bugatti Chiron, a nivel técnico, posee un detalle que encantará a los amantes de la velocidad: la suspensión es regulable en tiempo real. Para ello, utiliza un sistema láser para medir la distancia al suelo y así ajustar la carrocería al suelo lo máximo posible para reducir la resistencia al aire.
Asimismo, este modelo de coche cuenta con un sistema de propulsión de serie y con un motor de 8.0 W16 con cuatro turbos que desarrolla 1.600 CV de potencia. Además, tiene una caja de cambios automática de doble embrague y siete marchas y un sistema de tracción integral.
Un récord de pura potencia
El escenario elegido para lograr el objetivo de convertirse en el coche más rápido del mundo fue el circuito de Ehra-Lessien, Alemania. Andy Wallace, piloto que consiguió alcanzar este hito, se montó en el vehículo el pasado 2 de agosto del 2019 para conseguir un logro que es historia en el mundo del motor.
De esta manera, la compañía Bugatti recuperó el trono perdido en noviembre del 2017, consiguiendo llevar hasta los 490’484 kilómetros por hora al nuevo Chiron Super Sport, un modelo que había provocado, antes de la prueba, un sinfín de rumores que apuntaban al éxito rotundo.
Source: Coches