20MINUTOS.ES
- Algunas compañías optarían por no renovar su póliza tras el incidente, según el análisis realizado por arpem.com.
- Un empleado del club recogió al jugador tras el choque para que llegase a tiempo a la concentración del equipo.
Una de las aristas más agudas a tener en cuenta a la hora de adquirir y circular con vehículos exclusivos de elevado coste son los seguros. Es una problemática con la que suelen encontrarse muchos futbolistas: son muy jóvenes, con pocos años de experiencia al volante, pero sus altos sueldos les permiten comprarse algunos de los coches más caros del mercado. En esa situación se encontraba el delantero del Fútbol Club Barcelona Neymar, de 24 años, que el pasado fin de semana tuvo un accidente con su Ferrari 458 Spider, adquirido en octubre del año pasado.
El deportivo, con un precio de salida de 257.899 euros, circulaba a manos del brasileño por la autopista cuando, antes de abandonarla, pasó sobre un charco de barro que le hizo perder el control, según cuenta un testigo presencial del choque. El vehículo se precipitó contra un quitamiedos tras girar sobre sí mismo e impactó contra él, aunque el jugador salió ileso y pudo disputar el partido contra la Real Sociedad. De hecho, no llegó ni a esperar a que los servicios de asistencia fuesen a socorrerle, pues un empleado del club le recogió en el acto para llevarle a la ciudad deportiva con el resto del equipo.
Según los cálculos de arpem.com, web especializada en seguros para vehículos, al jugador culé le habría costado entre 2.687 (Mapfre) y 4.791 euros (Pelayo) asegurar su Ferrari antes del accidente. Su supuesto, el de una persona menor de 25 años, con seis años de carné de conducir y sin siniestros en su historial, daba como resultado que tan solo esas dos compañías ofreciesen resultados de seguros para un vehículo tan exclusivo a manos de una persona tan joven, especialmente para una póliza a todo riesgo sin franquicia.
Además, aunque el brasileño optó por marcharse del lugar con un empleado del Fútbol Club Barcelona que acudió a recogerle, ambas compañías contemplan la opción de incluir servicios como la asistencia en viaje, el traslado en grúa al taller, taxis para marcharse del lugar del accidente o coches de sustitución añadiendo al precio de la póliza alrededor de 20 euros. De hecho, uno de los compromisos de Pelayo es que si tras el accidente la grúa no aparece en un plazo de una hora, el asegurado no paga la siguiente anualidad.
¿Y en caso de accidente?
Ambas compañías aseguran la reparación de los accesorios de serie del vehículo dañados en la colisión del brasileño, pero ninguna de las dos cubriría los gastos de reparar elementos opcionales. Si el siniestro se computase como daños propios, las dos compañías continuarían asegurando al jugador con el mismo precio al ya pagado en el año anterior.
Otro caso distinto sería si el accidente se considerase daños a terceros. En este supuesto, Pelayo no asumiría el riesgo de renovar el seguro, y Mapfre optaría por aumentar el precio anual hasta los 8.260 euros, según los datos ofrecidos por el comparador. Para obtener el dato de forma precisa habría que calcular a cuánto ascienden los desperfectos ocasionados por el choque en el quitamiedos, lo que influiría en la subida del precio de la póliza.
Source: Coches