Cuando uno piensa en un coche con más de 1.000 CV de potencia, enseguida vienen a la mente hiperdeportivos inalcanzables, con diseños extremos y precios desorbitados que se acercan al medio millón de euros. Sin embargo, la realidad es que existe un modelo con el que superas la barrera de los 1.000 CV, puedes llevar a 4 ocupantes (además de a ti mismo) a bordo, tiene tracción a las cuatro ruedas, y goza de un espacio de carga envidiable, con nada menos que 798 litros de capacidad total. Y todo ello por poco más de 100.000 euros.
Se llama Tesla Model S Plaid y, aunque parezca mentira por si silueta y su espacio interior, esta berlina dejará en evidencia a casi cualquier Ferrari o Lamborghini que se te coloque al lado. Nosotros hemos podido probarlo en profundidad durante 7 días y lo cierto es que hemos tenido sensaciones que no habíamos tenido con ningún otro coche que hayamos probado. Estas son sus claves.
1. Unas cifras que marean
1.020 CV de potencia, un 0 a 100 km/h en 2,1 segundos, una velocidad punta de 320 km/h y una autonomía de hasta 600 kilómetros. Es evidente que con semejantes números se puede intuir la magnitud de coche ante el que estás antes de subirte, pero, de verdad lo digo, animo a cualquiera que tenga la oportunidad de experimentarlo, que lo haga. Es, sencillamente, increíble.
La manera que tiene el Model S Plaid de acelerar y, especialmente, de seguir acelerando cuando crees que no ya no es posible empujar más, es espectacular. De hecho, tras hacer varias salidas lanzadas desde parado (Launch Control), el Model S Plaid consiguió lo que ningún otro superdeportivo ha logrado, ni tan siquiera los coches de rally, de competición o la Toyota Hilux del Dakar con la que Nasser Al-Attiyah me hizo saltar por los aires en numerosas ocasiones: tuve que pararme porque me encontraba revuelto y con mal cuerpo. Tanto es así que me quedé sin cenar… El Model S Plaid es brutal como pocos, pero sólo si tú quieres.
2. No deja de ser un coche familiar
Pero lo más sorprendente es que, a pesar de todo lo mencionado anteriormente, el Model S Plaid no deja de ser un sedán de 5 puertas, con espacio para 5 personas, sus maletas y un nivel de confort muy superior a lo que rivales de potencias similares pueden ofrecer. Su suspensión neumática regulable, además de permitirnos elevar el coche bastante evitando así rascar en bajadas o badenes, también filtra de manera muy correcta las imperfecciones de la carretera, especialmente en su modo más confortable. También es muy destacable su maletero. O bueno, más bien sus maleteros, porque al tratarse de un Tesla, es decir, un 100% eléctrico, no sólo cuenta con el maletero convencional, que ofrece 709 litros de capacidad, sino que también esconde otro delantero, bajo el capó, con otros 89 litros extra de almacenaje.
3. La calidad es realmente buena
Mucho se ha hablado de la calidad de Tesla, pero, al menos en las unidades que yo he podido probar; que han sido todas (Model 3, Model Y, Model X y Model S), este punto negativo que se le ha otorgado, sobretodo en redes sociales, no he podido verlo por ningún lado. Los materiales son de muy buena calidad, con piel, Alcantara, aluminio, plásticos blandos, cristal, fibra de carbono… Sinceramente, por los 39.990 euros que cuesta un Model 3 básico, a los que hay que restarle hasta 7.000 euros del Plan Moves III, me cuesta mucho encontrar un vehículo que ofrezca una calidad mejor o, incluso parecida, en ese rango de precio.
4. Su tecnología no tiene rival
Y este es otro punto que se relaciona con el anterior, porque dentro del precio del que hablaba (menciono el Model 3 porque es el más barato y tiene, básicamente, los mismos materiales y tecnología, a excepción de los modelos Performance y Plaid, que el resto), Tesla incluye todo su arsenal de tecnología. Su pantalla central, de gran tamaño, alberga un sistema operativo que, al menos a día de hoy, no tiene rival en la industria del automóvil. Para mí, Tesla ha sabido ‘inspirarse’ de manera excelente en lo que más triunfa de Apple. Tanto es así que hasta la interfaz de uso de su sistema se parece de manera exagerada a la de la marca de la manzana. Esto hace que no sólo nos sea familiar, sino que además es muy claro, organizado de manera perfecta, con múltiples opciones de personalización, muy bien pensado, minimalista, sin abrumar con millones de opciones, y con una fluidez de su pantalla que está a años luz de la gran mayoría de fabricantes del sector.
Y ya no hablamos de la cantidad de elementos que incluye dentro de dicho sistema, desde el Autopilot o juegos para entretenerse en las paradas para cargar (tiene integrado hasta Steam), hasta aplicaciones para ver series, películas o vídeos como Netflix o YouTube, pasando por una app para crear música, un megáfono con distintas voces para hablar con el exterior o distintos sonidos para cuando bloqueamos el coche. Esto puede parecerle a mucha gente una sarta de tonterías que no aportan nada, pero yo soy partidario de que siempre es mejor tener de más que de menos. Para no usarlos siempre habrá tiempo.
5. Una gran autonomía
Para una bestia 100% eléctrica de 1.020 CV de potencia, tener un alcance eléctrico de hasta 600 kilómetros es más que destacable. Sus equivalentes en potencia, de gasolina, no superarán esta cifra ni de lejos. Es cierto que, como con todo coche, y más con los eléctricos, acercarnos a dichos números dependerá mucho en la manera en la que conducimos. Nosotros, para hacer una prueba a fondo, hicimos un viaje con el Model S Plaid: de Madrid a Jávea, y vuelta. A ritmos, digamos que, ‘alegres’, el Model S Plaid se comportó realmente bien. Hicimos una parada a mitad de camino para cargar, pero por el hecho de no tener que hacerla al llegar al destino, y en esta parada intermedia tan sólo nos detuvimos 18 minutos, lo que tardamos en ir al baño y pedir un café. Con esto, llegamos a nuestro destino y aún nos sobraba en torno al 30% de la batería, más que suficiente para movernos por la zona y, antes de salir de vuelta, cargarlo hasta el 100% en un Supercargador ultrarrápido de 250 kW de potencia.
6. Relación precio-potencia imbatible
Desde 108.970 euros, el Tesla Model S Plaid no tiene rival en cuanto a caballos por euro. Su rival más directo en cifras, el Porsche Taycan Turbo GT, con 1.034 CV de potencia, arranca en 248.685 euros; más del doble, y su autonomía es ligeramente inferior. Además, hay que meter en la ecuación el hecho de que Tesla incluye también su red de Supercargadores, que por ser cliente de la marca tienen un precio inferior en las recargas, además de regalar 20.000 kilómetros en supercargas con la compra de un Tesla nuevo.
Source: Coches