Sáb. Dic 21st, 2024

Todos conocemos la teoría de cómo se debería conducir para evitar accidentes de tráfico. Ser precavido y prestar atención a la carretera, dejando el teléfono móvil y otras distracciones de lado; señalizar todas nuestras maniobras y movimientos con tiempo, evitar comportamientos agresivos o peligrosos cuando estamos detrás del volante…

En general, la idea es ser cívico y respetuoso con las normas de tráfico y el resto de usuarios de la calzada, pero el razonamiento se queda muchas veces en eso: en una teoría. Algunos conductores tienden a circular con prisa e impaciencia, lo que les lleva a ser muy apremiantes y agobiantes con otras personas en circulación.

Uno de los gestos más clásicos en este tipo de conductores es la falta de respeto a la distancia de seguridad. Algunos datos que demuestran que sigue siendo una asignatura pendiente confirman que en torno a un 16% de los conductores no guardan distancia con el coche que les precede, según el observatorio de Autopistas, de Abertis. Los datos de siniestralidad del 2018 manejados por Pons Seguridad Vial muestran que un 27% de las sanciones estuvieron motivadas por una infracción a la distancia de seguridad obligatoria.

Multa por no respetar la distancia de seguridad

Pues bien, no respetar la distancia de seguridad es una infracción recogida en el Reglamento de Conductores que está sancionada con 200 euros de multa y la pérdida de 4 puntos en el carné de conducir.

Está clasificada como una falta grave y, dependiendo de las circunstancias en las que se dé, podría ser incluso motivación para una multa por conducción temeraria, que ascendería hasta los 500 euros y la detracción de 6 puntos.

Cómo calcular la distancia de seguridad

Para calcular la distancia de seguridad que hay que guardar con el coche que va delante hay que tener en cuenta factores como la velocidad de circulación, el estado de la vía y el de la propia mecánica de nuestro coche. Se puede aplicar la regla del cuadrado de la DGT, que consiste en una sencilla operación matemática.

Por ejemplo, si circulamos a 90 km/h hay que quitar la última cifra a la velocidad y multiplicarla por sí misma (o sea, 9×9). La distancia mínima deberá ser de 81 metros, entonces. Si llueve o hay condiciones adversas, habrá que duplicar esa cantidad.

Por último, se puede aplicar la regla de los tres segundos para hacer los cálculos in situ. Se escoge un punto de referencia como una señal y cuando el coche delantero la pase, contaremos «1001, 1002, 1003». Si en ese margen nosotros no hemos alcanzado esa misma señal, estaremos guardando la distancia de seguridad adecuada.


Source: Coches

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por admin