El sector de los vehículos de segunda mano en España ofrece, en ocasiones, buenas oportunidades para hacerse con un coche a un precio asequible y con entrega inmediata, especialmente ante el aumento de la demanda y el consecuente incremento en el coste medio. Por eso, muchas personas se decantan por esta opción antes de comprar un coche totalmente nuevo.
Sin embargo, pese a sus innegables ventajas, adquirir un automóvil de segunda mano conlleva ciertos riesgos, siendo más probable sufrir algún tipo de fraude o estafa, sobre todo en transacciones entre particulares. Estos timos en el mercado de coches usados se repiten cíclicamente, y de vez en cuando se desmantelan redes dedicadas a estafar a compradores.
Manipulación del cuentakilómetros
Uno de los engaños más conocidos y fáciles de detectar gracias a los avances tecnológicos es la manipulación del cuentakilómetros, que consiste en alterar el contador para simular un menor recorrido y así inflar el precio de venta. Este fraude es peligroso, ya que el comprador puede saltarse mantenimientos y sustituciones de piezas, aumentando el riesgo de averías o accidentes.
Falsificación de documentos
Otro engaño habitual es la falsificación de documentos, como el libro de mantenimiento o la documentación del vehículo. Si estos no corresponden con el modelo en venta, es imposible conocer su estado real o las reparaciones realizadas, pudiendo acabar con un coche que requiera costosas visitas al taller. Asimismo, si el número de bastidor o matrícula no coincide, o directamente no existe documentación acreditativa de la propiedad, es mejor desistir de la compra, pues podría tratarse de un vehículo robado.
Vicios ocultos
Los vicios ocultos son otra forma de fraude, donde el coche presenta fallos o falta de mantenimiento no detectados en la revisión previa a la compra. Con los recientes cambios normativos, será el vendedor quien deba asumir la reparación, pero siempre es recomendable inspeccionar a fondo el vehículo antes de firmar el contrato.
Coches inexistentes
Por último, la venta de coches inexistentes es una estafa clásica que se ha extendido gracias a los anuncios online. Los estafadores publican fotos de vehículos y convencen a los compradores para que realicen transferencias sin ver el coche en persona. Para evitar este timo, es fundamental probar el automóvil antes de pagar y siempre firmar un contrato de compraventa.
En definitiva, el mercado de coches usados puede ser una excelente alternativa para adquirir un vehículo a buen precio, pero es crucial extremar las precauciones y estar alerta ante los fraudes más comunes. Revisar a fondo el coche, comprobar su documentación y evitar transacciones sospechosas son claves para una compra segura y satisfactoria.
Source: Coches