Una de las dudas que rodea al mercado de los vehículos eléctricos (híbrido, híbridos enchufables y 100% eléctricos) es el elevado precio que tienen frente a los de combustión, pero, ¿realmente son más caros?Aunque poco a poco los coches propulsados por electricidad son más accesibles, todavía les queda un largo camino por recorrer. Por ello, diferentes marcas automovilísticas están trabajando en la mejora tecnológica para conseguir reducir el precio final de los modelos eléctricos.Un claro ejemplo de ello es la firma española Seat. Desde la marca han confirmado que su compromiso junto con el grupo Volkswagen es producir coches eléctricos «para millones y no para millonarios». Entre los avances tecnológicos que ha conseguido la firma para abaratar el precio de los eléctricos, encontramos la reducción en un 80% del coste de las baterías.Aunque la inversión inicial en un coche eléctrico es superior a la de un vehículo convencional, el precio se puede ver compensado en el tiempo por el ahorro que supone recargar el coche. Esto es debido a que el coste de la electricidad es sensiblemente inferior a la gasolina y el diésel.Por otro lado, desde Seat explican que se calcula que los costes de mantenimiento de un eléctrico son solo un tercio de los de un vehículo con propulsión convencional.Además de estas ventajas, existen diferentes ayudas que hacen que disminuya considerablemente el precio final. Diferentes planes como el Moves o Movalt permiten a los clientes potenciales obtener una notable rebaja en la adquisición de su nuevo vehículo. La principal finalidad de este tipo de planes es ayudar a la compra de coches más ecológicos para, de esta forma, luchar contra el cambio climático y mejorar la calidad del aire.Por último, este tipo de coches también cuentan con una serie ventajas y beneficios frente a los de combustión, como descuentos en el impuesto de circulación y accesibilidad gratuita en grandes ciudades.
Source: Coches