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- La medida es un experimento piloto de la DGT.
- ‘Radares en cascada’: qué son y cómo evitarlos.
- Estas son las multas si te pilla un radar de velocidad.
El exceso de velocidad es una de las principales causas de mortalidad en las carreteras españolas. Para combatir esta lacra, la Dirección General de Tráfico cuenta con casi 2.000 radares fijos, móviles y de tramo distribuidos a lo largo de toda la geografía española. Su finalidad es garantizar la seguridad de los conductores, minimizando al máximo el riesgo de perder la vida al volante.
La técnica de los ‘radares en cascada’ es uno de los últimos métodos puesto en marcha, pero no el único. Estas medidas, como el truco de la DGT para hacer más útiles los radares de velocidad, conviven con otros procedimientos más antiguos, pero, al mismo tiempo, desconocidos para el público en general.
Desde hace un tiempo, la Dirección General de Tráfico utiliza unas marcas viales verdes en la carretera cuyo fin es que el conductor de un vehículo reduzca la velocidad. Esta medida, aprobada por la DGT y la junta de Castilla y León en 2016, constituye una experiencia piloto en España que ya se ha aplicado con éxito en otros países como Suecia y Holanda.
En estos países se ha demostrado que las marcas de colores generan en los conductores la sensación de estrechamiento del carril para inducirles a moderar su velocidad. Se pretende que el usuario de la vía identifique y vaya asociando estas indicaciones a tramos de carreteras de velocidad controlada, con el fin de que, en un futuro cercano, una vez producido el efecto de concienciación en los conductores, no sea necesaria la instalación de sistemas de control de velocidad, y se obtenga una carretera autoexplicativa.
Hasta el momento, estas líneas se ubican en calzadas únicas y con doble sentido de circulación en Castilla y León. Se trata de trazados con largas rectas y anchura que oscila entre los tres y los tres metros y medio, además de curvas horizontales de radio amplio.
Source: Coches
