20MINUTOS.ES
- Evita hacer fuertes frenadas, conduce con precaución, ve más despacio y con más distancia de seguridad.
- Efecto aquaplaning: qué es, cómo evitarlo y cómo controlarlo.
- Si sufres una inundación en el coche, ¿quién cubre los daños?
- Te contamos qué debes revisar en tu vehículo ahora que llega el mal tiempo.
El Real Automóvil Club de España (RACE) ofrece una serie de consejos para conducir con lluvia.
Tienen en cuenta varios elementos como el mantenimiento del vehículo y la forma de conducir.
Cuando empiece a llover ten especial precaución al volante. Cuando conduces con el asfalto mojado ten en cuenta que los neumáticos no tienen tanta adherencia como en seco. Incluso recuerda que se puede producir el efecto aquaplaning (en este enlace te contamos qué es, cómo evitarlo y cómo controlarlo). Los motoristas tienen que tener en cuenta que las primeras gotas son las más peligrosas ya que se mezclan con la grasa y suciedad del suelo y hace que el asfalto sea especialmente resbaladizo. Por eso, extrema la precaución al volante y reduce la velocidad para que tengas más tiempo de reacción.
Actitud de conducción
- Evita el efecto spray: Cuando llueve y circulas muy cerca del vehículo que está delante de ti, puede echar el agua que evacuan los neumáticos en tu parabrisas, provocando así que tu visibilidad sea menor. A esto se le conoce como efecto spray. Para evitarlo, guarda la distancia de seguridad adecuada y así evitarás el agua pulverizada que sale de la rueda de los vehículos que te rodean.
- Frena con suavidad: Si frenas muy fuerte con el asfalto mojado, las ruedas pueden bloquearse a pesar del ABS. Con lluvia, frena de forma gradual y sé sutil con el tacto del freno. Si conduces con una distancia de seguridad adecuada a las condiciones de la vía no te será necesario frenar tanto. Cuando vayas a negociar una curva, anticipa la frenada y hazlo cuando estás en la recta. Si lo haces durante la curva, el coche podrá subvirar o sobrevirar más fácilmente.
- Motoristas, cuidado con la pintura de la calzada: Aquellos que van en un vehículo de dos ruedas tienen que tener especial atención a las señales horizontales pintadas ya que cuando hay lluvia resultan extremadamente resbaladizas (por ejemplo, los pasos de peatones). Lo mismo ocurre con las rejas o alcantarillas. Evita pisarlas y conduce tocando el freno de la forma más dulce posible para que no se te desestabilice la moto.
- Más distancia de seguridad: En condiciones climáticas adversas lo mejor es reducir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad. En el siguiente tweet de la DGT indican la diferencia de distancia a la hora de frenar en mojado y en seco.
Prepara tu vehículo para la temporada otoño-invierno. Revisa neumáticos y elementos de visibilidad e iluminación https://t.co/TzhZBb6Lnz pic.twitter.com/xszR3J81af
” Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) 26 de septiembre de 2017
Mantén tu vehículo a punto
Cuando hay lluvia es fundamental que tu vehículo tenga un mantenimiento correcto. Debes cuidar los siguientes elementos:
- Climatización: Te ayudará a evitar que el vaho aparezca. Si no has podido evitarlo, abre las ventanas y activa el aire acondicionado con una temperatura de unos 20ºC. Recuerda que algunos coches tienen un botón que hace funcionar el aire acondicionado al máximo para desempañar en pocos segundos el parabrisas delantero. También existe otro botón de luneta térmica trasera para quitar el vaho del parabrisas trasero.
- Limpiaparabrisas: Tal como comentamos en esta información, los fabricantes recomiendan cambiar estos elementos cada año. Ten en cuenta que un buen estado de los mismos implica que la goma no esté reseca para que no pierda efectividad y quite de forma equitativa el agua del parabrisas. El nivel del líquido del depósito debes revisarlo y recuerda que con bajas temperaturas el agua con jabón no vale, ya que se puede congelar. Tienes que añadir anticongelante.
- Luces: Con la lluvia la visibilidad se reduce y hay menos luz. Aunque los coches más modernos ya tienen luz diurna, si no es tu caso, utiliza las luces de cruce -no las antiniebla si no hay niebla ya que deslumbra a los demás conductores-. Recuerda lavar de vez en cuando los faros para que la suciedad no haga que la iluminación no sea tan efectiva.
- Amortiguadores: Con los amortiguadores en buen estado tu coche controlará mejor los movimientos de la carrocería y la dirección será más precisa. Además, si la mantienes correctamente evitarás pérdidas de adherencia tanto en el eje delantero como en el trasero de tu coche.
- ESP (Control de Estabilidad): Ha sido el avance más importante de los últimos años en la seguridad activa de los automóviles. Su objetivo es evitar que se produzca una pérdida de control del vehículo. Actúa sobre el motor y de forma selectiva sobre el freno de cada rueda. Más información en el glosario de km77.com. Si vas en coche, mejor que sea en uno con ESP.
- Frenos: Con la lluvia, la efectividad de los frenos baja y el vehículo tarda más en frenar. El freno en buen estado hará que tengas un buen tacto en el pedal y no bloquees las ruedas y el ABS actúe. Revisa tanto las pastillas como los discos y la presión del circuito (si tiene burbujas de aire no funcionará correctamente).
- Neumáticos: Son el único punto de contacto entre el vehículo y el asfalto. Cuanto más dibujo tenga el neumático más agua podrá evacuar. La profundidad mínima por ley es de 1,6 mm, pero evita llegar a ese límite. Con lluvias fuertes, un neumático con menos de 3 mm de profundidad no realizará bien la evacuación de agua. Del mismo modo, los neumáticos deben tener la presión correcta. Si está por debajo de lo recomendado por el fabricante, el dibujo de la banda de rodadura se deformará demasiado y no será tan efectivo a la hora de evacuar el agua. Si está por encima, la superficie de contacto del neumático será menor y tendrá menos agarre. Todo esto influye en que el aquaplaning aparezca antes o después en tu vehículo.
Source: Coches