Cada año, las marcas de coches van incluyendo novedades para mejorar sus modelos y adaptarlos a los nuevos tiempos. Los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS) son unas innovadoras soluciones tecnológicas que se han incluido en los vehículos para mejorar la seguridad de conductores, pasajeros y peatones. A España llegaron después de que en 2019 la Unión Europea aprobara el Nuevo Reglamento de Seguridad 2019/2144, donde se recoge la nueva regulación con los requisitos de seguridad general de los vehículos.
Su objetivo principal es, tal y como explica la Dirección General de Tráfico (DGT) reducir «de manera significativa las muertes y lesiones graves en las carreteras de la Unión Europea mediante la introducción de tecnologías de seguridad de vanguardia como un equipamiento normalizado de los vehículos».
De esta manera, todos los coches de nueva homologación debían incorporar al menos ocho sistemas: Detector de somnolencia (DDR), alerta de tráfico cruzado (RCTA), caja negra (EDR), asistente de velocidad inteligente (ISA), alerta de cambio involuntario de carril (LDW), sistema de frenado de emergencia (ESS), alerta de uso de cinturón en todas las plazas e inhibidor de arranque con alcoholímetro. Aunque también existe otro asistente importante que llevan incorporado algunos coches: el sistema BSM.
Qué es el sistema BSM
El Sistema de Monitorización de Ángulos Muertos (BSM) es conocido como un detector de ángulos muertos que es muy útil para los conductores, puesto que actúa en situaciones en las que existe un riesgo alto de colisión. Los puntos ciegos son uno de los grandes enemigos al volante para los conductores. El BSM se encarga precisamente de alertar en caso de peligro evitando alcances laterales o traseros.
Esta tecnología avisa al conductor de la presencia de algún vehículo en esos ángulos muertos en los que no se tiene una visión directa. Para ello, se suele hacer a través de una señal luminosa en los espejos retrovisores laterales. Sin embargo, hay en algunos modelos en los que no es así, sino que utiliza una señal en el interior del coche.
Un ejemplo. Si un coche se acerca por el lado izquierdo y entra en un punto ciego, se enciende la luz del retrovisor izquierdo para avisar del movimiento. Lo mismo ocurre en el lado contrario. Y no solo eso, sino que posee otras funciones. En el caso de que el conducto señalice un cambio de carril y no se haya dado cuenta de ese vehículo en el ángulo muerto, el sistema BSM hace parpadear la luz del retrovisor y puede emitir hasta una señal acústica.
Otros sistemas más avanzados tienen varias funciones activadas: la vibración del volante o también pueden actuar en la dirección y en los frenos (de forma suave). La tecnología BSM está compuesta por diferentes elementos:
- Sensores.
- Unidad de control.
- Indicadores de advertencia (visual, sonora o ambos).
- Sistema de frenado (si dispone de Asistente de cambio de carril).
Source: Coches
