En España, con el paso de los años, miles y miles de ciudadanos han visto cómo ha ido evolucionando considerablemente la tecnología en todos los aspectos de la vida. Lógicamente, el mundo del motor no iba a quedarse atrás y en la actualidad contamos con un sinfín de motores capaces de cuidar el medioambiente de la forma más efectiva posible.
¿Qué es un coche térmico y qué combustible utiliza?
Si le preguntas a gran parte de la ciudadanía por un coche térmico, seguramente no sepan contestarte a esta pregunta. Pues bien, un coche térmico es un tipo de vehículo que utiliza un motor de combustión interna para convertir la energía química del combustible, ya sea diésel o gasolina, en energía mecánica.
Cabe destacar que este tipo de motor ha sido clave en la historia de la automoción, representando la base tecnológica sobre la que se ha desarrollado la mayoría de los automóviles tradicionales y modernos. Actualmente, hay dos tipos de coches: los eléctricos y los térmicos.
¿Cómo funciona un coche térmico?
El funcionamiento de un coche térmico se puede dividir en varios pasos dentro de su ciclo de funcionamiento. En primer lugar, hablaremos de la admisión de aire y su combustible: el motor toma aire del exterior y lo mezcla con el carburante en cuestión. En el caso de la gasolina, el combustible se mezcla antes de ingresar en los cilindros, mientras que en el diésel se inyecta directamente en el mismo.
En segundo lugar, tenemos la comprensión: el pistón ubicado dentro de los cilindros del motor se moverá hacia arriba, comprimiendo la mezcla de aire (en diésel) y combustible (en los de gasolina). Esta compresión aumentará de forma considerada la temperatura y la presión.
Una vez llegados a este punto, se producirá la denominada explosión, es decir, en motores de gasolina, elaborará como una especie de chispa producida por la bujía tras una mezcla de aire y combustible, mientras que en los diésel se creará a partir de una temperatura de aire comprimido y su alta presión.
Posteriormente, la combustión generará una explosión que empujará el pistón hacia abajo para transmitir energía al volante motor a través de la cigüeñal, lo que provoca que el vehículo se mueva. Por último, los gases se expulsarán del cilindro a través de las válvulas de escape, las cuales pueden incluir una especie de catalizador capaz de reducir las emisiones contaminantes que salen al exterior.
Ventajas de un coche térmico
- Autonomía: los coches térmicos pueden recorrer largas distancias sin necesidad de recargar combustible.
- Infraestructura: en la actualidad, existen muchas más estaciones de servicio para repostar que estaciones de carga para vehículos eléctricos.
- Precio de adquisición: generalmente, los automóviles térmicos tienden a ser más baratos que los eléctricos o híbridos, aunque esto está cambiando.
Desventajas de un coche térmico
- Expulsa al exterior una gran cantidad de emisiones contaminantes.
- Eficiencia energética.
- Dependencia de los combustibles fósiles, como es el caso del diésel o la gasolina.
Source: Coches