En las últimas semanas, el precio de la gasolina y el diésel está dando un respiro en España, debido a que se ha producido un descenso significativo en el coste de llenar el depósito de un vehículo en nuestro país, aunque sigue existiendo una variación entre las gasolineras tradicionales y las ‘low cost’.
En concreto, estas últimas se encuentran en algunas ocasiones en el punto de mira debido a sus precios bajos, ya que hay conductores que se pregunta acerca de la calidad de sus combustibles. Por ello, surge la duda sobre la posibilidad de mezclar gasolina ‘low cost’ con la de una gasolinera tradicional, como Repsol o Cepsa.
¿Es posible mezclar ambos combustibles?
La respuesta es sí, ya que tanto la gasolina que se vende en una ‘low cost’, como la de una gasolinera tradicional, debe contar con un certificado de homologación estatal, además todo ese combustible lo distribuye Exolum, es decir, la antigua Compañía Logística de Hidrocarburos.
Por tanto, Exolum garantiza esa calidad mínima, en definitiva, no hay ningún problema en mezclar ambos combustibles, aunque cabe destacar que la gasolina y el diésel que se vende en las gasolineras tradicionales cuenta con aditivos que benefician el motor de quien reposta en estas estaciones de servicio.
¿Por qué las gasolineras ‘low cost’ son más baratas?
La razón se debe a varios factores. Primero, el combustible que venden tiene menos aditivos, como hemos comentado en las líneas anteriores, lo que reduce los costes de producción. Además, estas estaciones de servicio suelen requerir una inversión inicial más baja que las tradicionales, y sus costes operativos son menores, ya que en algunos casos no cuentan con empleados en las instalaciones.
Por último, las gasolineras ‘low cost’ adquieren el combustible a diario, buscando al distribuidor con el precio más competitivo, lo que les permite maximizar sus beneficios.
¿Qué sucede si me equivoco de combustible en el coche?
Este error, que puede ocurrirle a cualquiera, tiene diferentes consecuencias dependiendo de cuándo lo notemos. Si nos damos cuenta justo después de llenar el depósito con el combustible equivocado, solo será necesario vaciar y limpiar el tanque.
Sin embargo, si comenzamos a conducir con diésel en un coche de gasolina, el motor se detendrá al intentar arrancar, ya que el gasóleo no es compatible con el sistema de chispa de las bujías. En el caso opuesto, si se pone gasolina en un coche diésel, el motor arrancará, pero emitirá sonidos extraños antes de detenerse, lo que puede dañar gravemente la bomba de inyección.
Source: Coches