La marca sueca sigue su hoja de ruta hacia la sostenibilidad con la presentación de su cuarto modelo cien por cien eléctrico, del que ya se admiten registros vía web pero que estará a la venta en Europa y España en los próximos meses. Con un elegante formato SUV, aunque también con cierto aire de monovolumen, el Volvo EX30 mide tan solo 4,23 metros de largo (menos que el XC40), por 1,83 de ancho y 1,55 de alto.
Dadas sus dimensiones y tecnología, su hábitat natural será la ciudad, y además sin restricciones gracias a las mecánicas de cero emisiones que lo impulsan, pero sin olvidar el exquisito trato a los ocupantes gracias al equipamiento y a su alto nivel de terminación. Y todo ello a un coste equivalente al de un coche térmico, porque el precio de partida estará en torno a los 36.000 euros, aunque también se podrá disfrutar por suscripción.
El director ejecutivo de Volvo, Jim Rowan, describe y posiciona el nuevo EX30 con claridad: “es un automóvil pequeño pero poderoso, porque ofrece todo lo que se puede esperar de un Volvo pero en un envoltorio más pequeño. Como cualquier Volvo, es un producto excepcional, seguro y diseñado en torno a las personas y sus necesidades”.
De su estética destaca su frontal limpio y con la parrilla cerrada, las ópticas de estilo digital que interpretan el tradicional “martillo” de la marca, las grandes ruedas y la trasera con faros verticales divididos en dos secciones.
Con 2,65 metros de distancia entre ejes, y a pesar de que es un coche pequeño, Volvo ha hecho un gran esfuerzo para que los ocupantes disfruten de un generoso espacio. El diseño interior, de inspiración escandinava, es minimalista y juega con la luz y el sonido para crear un ambiente inmersivo que aporte una agradable sensación de calma.
También dispone de dos maleteros, uno trasero con 318 litros y otro bajo el capó con 7 litros más que puede servir para guardar, por ejemplo, los cables de carga.
El sistema de impulsión básico lo compone un motor de 200 kW, el equivalente a 272 caballos, que se puede combinar con una batería de litio de 51 kWh de capacidad con la que la autonomía llega hasta los 344 kilómetros con una sola carga. Con igual mecánica, pero con una más potente (69 kWh) y elaborada batería de níquel, manganeso y cobalto, hay otra versión con un rango de utilización que se extiende hasta los 480 km.
La variante más prestacional de la gama es la Twin Motor Performance, la cual utiliza un propulsor en cada eje para dotar al conjunto de tracción integral y alcanzar así 315 kW (428 CV) de potencia final. Con la batería de 69 kWh de capacidad, la autonomía en este caso es de 460 km, pero sin duda destaca el apartado prestacional, ya que solo tarda 3,6 segundos en pasar de 0 a 100 km/h, convirtiéndose en el modelo eléctrico de Volvo que más rápido acelera.
Para la recarga, las baterías admiten entre 134 y 153 kW de potencia, de modo que la recuperación del 10 al 80% de energía está por debajo de los 30 minutos.
Por su parte, y como es habitual en Volvo, el entramado tecnológico es abrumador, empezando por una gran pantalla central del sistema multimedia de 12,3 pulgadas que lo aglutina absolutamente todo, incluida la información del cuadro de instrumentos. El software que lo gestiona, como sucede con otros modelos de la marca, está desarrollado en colaboración con Google, es compatible con Apple CarPlay y admite actualizaciones inalámbricas.
Las soluciones de conectividad también hacen posible la utilización de una llave digital (con apertura y arranque mediante dispositivo móvil), y en materia de seguridad este modelo es una referencia en el segmento gracias a recursos como la alerta de presencia de bicicletas, motos o patinetes al abrir las puertas o la nueva generación del asistente de aparcamiento Park Assist Pilot para todo tipo de maniobras.
Source: Coches