La siniestralidad en carretera es una de las preocupaciones de la DGT. La velocidad de conducción es uno de los factores que, según sus datos, más incide en las cifras de accidentes de tráfico y más agrava las consecuencias de las colisiones, por lo que Tráfico está buscando nuevos métodos que aplicar para reducir la velocidad y sus excesos al volante. Las carreteras secundarias y similares son las vías en las que más accidentes de tráfico se registran, así la DGT aplica sus nuevas medidas en este tipo de trazadas.
Por ejemplo, los dientes de dragón son unas nuevas señales pintadas en las carreteras antes de entrar en poblado que crean la sensación visual de que el carril se estrecha, por lo que el conductor tiende a reducir la velocidad de manera inconsciente.
Otro tipo de señales son las líneas verdes que la DGT empezó a probar hace ya varios años en dos carreteras de la Palencia, la CL-613 (Palencia-Sahagún) y la CL-615 (Palencia-Guardo). Estas líneas de color verde se pintan de manera paralela a la línea blanca que delimita el exterior del carril.
Qué son las líneas verdes de la DGT
El efecto es similar al del caso anterior. La línea interior crea una sensación óptica de estrechamiento del carril, por lo que el conductor tenderá a reducir la velocidad de circulación. Al detectar una carretera como más estrecha de lo que es, la percibimos más peligrosa y más complicada de recorrer.
Estas líneas verdes van acompañadas de señales verticales que advierten que nos encontramos en una vía con velocidad controlada, para que al conductor no le pille de imprevisto el tramo con doble línea de otro color y no se sobresalte al volante.
En qué carreteras se usan las líneas verdes de la DGT
La eficacia de estas líneas verdes ya ha sido probada en Suecia y Holanda, donde se ha demostrado que calman el tráfico. Eso sí, tienen que usarse en un tipo de vías con unas características concretas: rectas de larga distancias, en buen estado de conservación, con una anchura entre los 3 y 3 metros y medio, con curvas amplias y un riesgo bajo.
Este tipo de vías generan una cierta sensación de falsa seguridad que hace que la velocidad de circulación aumente. La función de las líneas verdes de la DGT es, precisamente, la de desmontar esa falsa seguridad generando una sensación de carril estrecho que obligue al conductor a estar alerta.
Source: Coches