Al final del año pasado, un total de 1.098 personas perdieron la vida en accidentes de tráfico y 4.395 necesitaron ser ingresadas en un hospital. Aunque estos datos demuestran que la siniestralidad en España no ha descendido todo lo que debería, los números muestran una bajada de 7’6 puntos en cuanto a fallecidos y 6’7 en cuanto a heridos se refiere en comparación con el 2018.
Entre los varios factores que pueden afectar a la gravedad de las lesiones o incluso pueden evitar la muerte de una persona en un accidente de tráfico, se encuentran los primeros auxilios que reciben las víctimas. Para proceder en caso de ser testigo de un siniestro en carretera o en ciudad, la DGT puso en marcha un protocolo de actuación hace ya unos años.
Este protocolo se guía por el lema PAS, que por sus siglas significa proteger, avisar y socorrer, aunque es necesario especificar cuáles son los pasos a seguir para no poner en riesgo nuestra propia vida y no empeorar las lesiones que hayan podido sufrir los heridos. Lo primero a lo que hay que prestar atención es si las víctimas ya están siendo atendidas o socorridas. En este caso, sobre todo en zonas como carreteras o autovías, se recomienda continuar la marcha sin entorpecer el tráfico o provocar más accidentes.
Lo más recomendable es parar nuestro coche en una zona que no moleste y que no suponga un riesgo, lo más pegado al arcén si es en la carretera. Hay que conectar las luces de emergencia y colocarse en chaleco reflectante antes de salir del coche. Si el vehículo accidentado está en llamas o transporta mercancía peligrosa, no hay que acercarse.
Es de vital importancia llamar a los servicios de emergencia, como el 112, y facilitar toda la información necesaria para que localicen el accidente lo más pronto posible (kilómetro de la carretera, número de la vía, dirección, puntos de referencia….). Será necesario también indicar el número de heridos, su estado y si hay circunstancias especiales, como la presencia de sustancias tóxicas. Hasta que la central no de la información por válida, hay que permanecer al teléfono.
En este último paso se trata más de lo que no hay que hacer de lo que realmente puede hacerse. Es muy importante no mover a los heridos ni sacarlos de los vehículos, ya que es podría empeorar su situación, y de no quitarles el casco a los motoristas; además de no proporcionarles ningún medicamento, comida o agua. También es conveniente no abandonar el lugar del accidente hasta que así lo indiquen los servicios de emergencia. Si se tienen conocimientos de primeros auxilios, se podrán realizar, así como acompañar a heridos y tranquilizarlos
Source: Coches