Pocas cosas vamos a descubrir ahora del Seat León, un compacto moderno, atractivo y versátil que, ya en su cuarta generación, ha convencido a 2,5 millones de clientes.
Actualmente se puede encontrar con carrocería de cinco puertas o con la familiar Sportstourer, y la gama contempla un buen surtido de motores: gasolina, diésel, de gas natural, híbrido ligero e híbrido enchufable con potencias que van de los 110 a los 204 caballos.
Desde finales de 2022, Seat ha querido centrar la oferta del León en los acabados más demandados, Style y FR, y también ha asociado estas últimas siglas, que caracterizan a los modelos más dinámicos, con el motor gasolina 1.5 TSI de 130 caballos.
Esta política comercial coincide con la retirada de la versión 1.5 TSI de 150 caballos, mecánica que Seat ha derivado a la marca hermana Cupra para convertirlo en el escalón de acceso al Formentor y al propio León.
Esto significa que quien quiera adquirir un Seat León de gasolina sin ningún tipo de electrificación, de etiqueta C, ahora puede optar por el motor tricilíndrico 1.0 TSI de 110 CV o por el 1.5 TSI de cuatro cilindros y 130 caballos. La explicación es clara: casi un 40% de los compactos que se venden en nuestro mercado tiene entre 110 y 129 caballos de potencia.
Como la combinación es novedad en la gama, hemos probado el Seat León FR con la carrocería Sportstourer y el motor 1.5 TSI de 130 caballos, el cual tiene un interesante precio de partida de 26.780 euros.
El acabado FR se caracteriza por detalles deportivos y una dotación más completa que el Style (25.070 euros con igual carrocería y mecánica). Como este, está subdivido en tres niveles, XS, XM y XL, pero ya desde el primero se aprecian diferencias como el paragolpes, las llantas de 17 pulgadas o las estriberas con la inscripción FR iluminada, todo lo cual se une al cuadro de instrumentos Digital Cockpit, el sistema multimedia con pantalla de 10 pulgadas o el selector de modos de conducción Seat Drive Profile.
Por 311 euros más entramos en el nivel XM, que ya incluye la iluminación Full LED, el Control de Chasis Adaptativo (que regula la dureza de la suspensión) o el cargador inalámbrico para el teléfono, mientras que el tope de gama XL añade por otros 207 euros el sistema de entrada y arranque sin llave, la cámara de visión trasera, el control de crucero adaptativo y predictivo, el sistema de reconocimiento de señales de tráfico, el detector de ángulo muerto o la alerta de tráfico posterior, por citar algunos elementos.
Un coche equilibrado en todos los sentidos
Desde luego, todo el valor añadido del acabado FR se nota cuando uno está ante este Seat León. Con los 4,6 metros de longitud de la carrocería familiar tiene incluso más empaque, y el nivel de realización interior es también formidable para un coche de corte generalista.
El puesto de conducción es cómodo y, aunque minimalista, mantiene al menos mandos táctiles en la base del sistema multimedia para regular la temperatura del climatizador y el volumen del sistema de sonido, pero todo lo demás pasa indefectiblemente por la pantalla central, cuyo funcionamiento es fluido y sencillo.
Lo mejor de este modelo está en la parte posterior, con unas plazas traseras amplias y un maletero de 620 litros que facilita que lo podamos llevar casi todo en viajes en familia o con amigos.
El bloque 1.5 TSI de gasolina turboalimentado ya hemos dicho ofrece 130 caballos, un nivel de potencia más que suficiente para mover con soltura a este León. No es un portento en cuanto a prestaciones (permite acelerar de 0 a100 km/h en 9,7 segundos), pero sus 200 Nm de par y el turbo permiten que la respuesta sea solvente, aunque no con tanto brío como la anterior de 150 CV, claro está.
Está asociado como única opción a un cambio manual de seis marchas, y los largos desarrollos permiten estirar bastante el motor cuando se necesita. Para sacarle jugo, debe manejarse en regímenes medios y altos, pero en los viajes o en el uso cotidiano, si no vivimos en una zona de montaña, mostrará su mejor cara con su funcionamiento suave y un nivel mínimo de sonoridad.
El consumo medio homologado es de solo 5,4 litros a los 100 km, una cifra a la que nos hemos acercado aplicando precisamente una conducción relajada. A esto ayuda el hecho de que, cuando se levanta el pie del acelerador o se “llanea”, la Gestión Activa de Cilindros de este León desconecta dos de los cuatro cilindros del motor, y ello reduce notablemente el gasto de combustible.
Eso sí, en una conducción combinada con recorridos urbanos, autovía y algo de montaña, el consumo medio final lo hemos establecido en 6,5 litros a los 100 km, que sigue siendo bajo para un coche de estas características.
Por lo demás, el tacto de este León es el del compacto de siempre: estable, cómodo y muy confortable, que invita a devorar kilómetros. Además, se conduce sin estar obsesionados con cargas de batería ni nada parecido, pudiendo superar sin despeinarse los 700 km de autonomía con un depósito de 45 litros.
Como conclusión, por la imagen y por la polivalencia de uso de la carrocería familiar, unido al reducido consumo de la mecánica y al precio moderado del conjunto, este Seat León 1.5 TSI FR Sportstourer de 130 caballos creemos satisfará a una buena porción de público que busque hoy por hoy un coche de gasolina, aunque algo menos a quienes den prioridad a las prestaciones por encima de la eficiencia.
FICHA TÉCNICA
Motor: gasolina.
Potencia (kW/CV): 96/130.
Cambio: manual, de 6 velocidades.
Largo (mm): 4.642.
Ancho (mm): 1.799.
Alto (mm): 1.450.
Maletero (litros): 620.
Velocidad máxima (km/h): 209.
De 0 a 100 km/h (seg.): 9,7.
Consumo medio (l/100 km): 5,4.
Emisiones CO2 (gr/km): 125.
Precio (euros): desde 26.780 euros.
Source: Coches