Aunque en el mercado español, el Tucson es el que se lleva los honores dentro de la marca coreana, además de ser en la actualidad uno de los modelos más vendidos en términos absolutos, el Kona cubre la retaguardia de forma adecuada y brillante.
Desde hace unos meses se comercializa en un nuevo formato que deja entrever una importante evolución. Empezaremos por el diseño que marca un antes y un después con especial atención a la elaborada firma lumínica que se ha creado tanto en la zona delantera como en la posterior.
En este sentido, el nuevo conjunto hace acopio de unas llantas también muy especiales y refuerza el diseño de los pasos de rueda para conseguir una imagen robusta y diferenciadora.
Completo porfolio de asistentes
Si nos adentramos en el interior, un territorio donde Hyundai ha modernizado una barbaridad todos sus modelos, el nuevo Kona sorprende por su dotación tecnología en la que no se echa en falta de nada.
Como no podía ser de otra forma, dos grandes pantallas digitales de 12,3 pulgadas (prácticamente unidas) nos reciben para hacer que el entorno esté a la última tanto en diseño como en conectividad o número de aplicaciones. Se dejan fuera, y al alcance de la mano, los mandos de la climatización y el pulsador con los distintos modos de conducción.
Con 4,36 metros de longitud y una batalla de 2,72 metros, cotas más generosas que antes, la segunda generación del Kona potencia su espacio interior para que tres ocupantes viajen cómodamente en la parte trasera. Mencionar igualmente una buena calidad de acabados que se aprecia en los diferentes ajustes, juntas o remates.
De todas las mecánicas disponibles (que tocan todos los palos en las arquitecturas disponibles para ser igualmente una referencia en este apartado) hemos probado ahora la última variante en incorporarse a la nueva gama como es el eléctrico que dispone de dos versiones: batería de 48,4 o 65 kWh y autonomías de 377 o 515 kilómetros respectivamente.
Un i-Pedal muy elaborado
Con 218 CV, la denominada “Long Range” (la de acceso se queda en 156 CV) muestra unas prestaciones suficientes para el modelo en cuestión y una agradable forma de comportarse para que su conducción no resulte un “tostón”.
En este capítulo, y de cara a conseguir los mejores resultados en eficiencia, nos ha gustado sobremanera el comportamiento del eficaz freno regenerativo que monta y que dispone de cuatro niveles de retención apoyado en unas prácticas levas en el volante para su activación.
El caso es que podemos elegir dentro de un amplio rango de posibilidades incluida la más restrictiva (denominada i-Pedal) que nos permite incluso conducir el coche únicamente con el pedal del gas. Esta última opción es la más adecuada para circular en ciudad de cara a obtener unos bajos consumos que no dejan de ser otra de las razones de ser de los coches a pilas.
Y para redondear la faena, este SUV añade la tecnología V2L para cargar dispositivos externos como por ejemplo un ordenador portátil o un patinete eléctrico.
Es evidente que el Kona ha dado un gran salto en este sentido y Hyundai está consiguiendo ser uno de los grandes expertos en electrificación con este modelo y con otros como los Ioniq que tan buena aceptación están teniendo.
Desde 45.350 euros
Tenemos que destacar que las versiones cien por cien eléctricas, y por sus necesidades aerodinámicas, resultan aún más atractivas que las convencionales. El carenado del frontal (que incluye la toma de carga) la gama de llantas específicas de hasta 19 pulgadas o el paragolpes posterior propio consiguen un aspecto muy personal y atractivo.
Por último, nos toca hablar de los precios a los que se vende este modelo con el motor más potente probado. Está disponible desde 45.350 euros (acabado Flexx) hasta los 52.400 euros de la variante Style sin considerar ningún tipo de ayudas o descuentos.
Sin duda, el Kona EV se nos antoja como una de las opciones más recomendables de su categoría, pues polivalencia de uso, habitabilidad, confort de marcha y equipamiento están a la altura de las circunstancias.
Source: Coches