La marca deportiva y española del Grupo Volkswagen ha conseguido, por tercera vez en tres años, el premio del Consejo Alemán de Diseño en el apartado de Prototipos. Lo hace con el concept car Tavascan, un SUV deportivo que Cupra presentó en el Salón del Automóvil de Frankfurt del año pasado.
Antes que el Tavascan, Cupra había logrado el mismo galardón con su prototipo eléctrico de competición, el e-Racer, en 2018, y con el Formentor en 2019, lo que sin duda demuestra que el trabajo que se está realizando desde esta aún joven marca es el adecuado.
¿Qué tiene de particular el Tavascan? La lista es larga, pero para empezar hablamos de un SUV eléctrico de apariencia robusta y deportiva que se caracteriza por una aerodinámica silueta tipo coupé. Está decorado con pintura metalizada líquida y por fuera destaca el logotipo iluminado de Cupra en la parte inferior del frontal, los pasos de rueda ensanchados o las llantas de 22 pulgadas.
Por dentro, la digitalización favorece un diseño sencillo a la vez que atractivo. El ambiente es muy agradable, a lo que contribuyen las luces Led en puntos estratégicos. Asimismo, el uso de tapicerías de cuero y Alcantara en combinación con detalles en carbono fomenta la deportividad, principal seña de identidad de la marca. Los asientos son tipo bacquet de competición y el volante recortado en la parte interior también deja clara su orientación. El resto lo pone la instrumentación digital con pantalla de 12,3 pulgadas y el sistema multimedia, en este caso con un monitor central que llega a las 13”.
En cuanto al sistema de propulsión, Cupra ha dispuesto de dos motores eléctricos, uno en cada eje, para ofrecer 225 kW (más de 300 caballos de potencia). Gracias a las baterías de litio de 77 kWh de capacidad, la autonomía llega hasta los 450 kilómetros.
Source: Coches