La industria automovilística europea avanza indefectiblemente hacia la electrificación, de eso ya no cabe duda, pero cuando a partir de 2035 todos los coches que se vendan sean eléctricos, todavía habrá millones de automóviles que se muevan con motores térmicos.
Para “alimentarlos” y dar respuesta a nuevas demandas, además de promover nuevas vías sostenibles, marcas de prestigio como Porsche (que no hay que olvidar pertenece al Grupo Volkswagen) exploran alternativas al tradicional combustible fósil.
Para ello se ha rodeado de otras grandes empresas, como Siemens Energy, Enel, Gasco o ExxonMobil, y ha invertido más de 100 millones de euros en HIF (Highly Innovative Fuels), concretamente a través de una planta especializada y experimental que se sitúa Haru Oni, Punta Arenas, al sur de Chile.
Esta es una zona de la Patagonia que se caracteriza por los fuertes vientos, y gracias a ello, a la energía eólica, junto con agua y CO2, se produce el novedoso hidrocarburo.
¿Y cómo se consigue? En primer lugar, dividiendo el agua en sus elementos constituyentes (hidrógeno y oxígeno). Después, se libera el oxígeno y se combina hidrógeno con CO2, capturado de la propia atmósfera, para formar metanol. En la fase final del proceso, ese metanol se convierte en gasolina.
El producto definitivo es ya una realidad y se ha probado con éxito en un Porsche 911 con motor bóxer de seis cilindros sin ningún tipo de modificación, y eso dibuja un ilusionante futuro, pues si el producto final se enviara a Europa a la escala industrial esperada, el transporte generaría poco CO2 si se pone en relación con la cantidad que se captura de la atmósfera al crear el propio combustible.
De momento, los 130.000 litros anuales que se producen en Haru Oni se van a utilizar en el mejor “laboratorio” posible, la competición, pues será el combustible de los coches participantes en la Porsche Mobil 1 Supercup. Para 2026 se espera que en Haru Oni se produzcan 55 millones de litros de e-fuel y, apenas dos años después, diez veces esa cantidad.
Por supuesto, este avance no frenará la estrategia de Porsche, que para 2030 tiene previsto que el 80% de los coches que venda sean cien por cien eléctricos, pero la alternativa del e-fuel servirá para seguir dando vida a los muchísimos modelos térmicos que sigan moviéndose por las carreteras sin recurrir a los combustibles fósiles.
Source: Coches