La compra o la venta de vehículos usados es un mercado que no deja de crecer gracias a sus múltiples ventajas, como la facilidad de conseguir un coche o una moto de un día para otro o el precio más reducido de estos modelos; y sus cada vez menos desventajas, ya que el control de las autoridades de tráfico sobre este tipo de transacciones y el estado del vehículo en venta cada vez son mayores, además de las garantías de compra.
Pero para completar de forma segura y legal la compraventa de un vehículo usado es necesario contar con una serie de documentos y completar varios trámites. La transferencia de un vehículo de segunda mano no es más que el cambio de titularidad del coche o de la moto que está en venta y es un procedimiento que implica tanto al comprador como al vendedor.
Como pasos previos en necesario que el comprador se asegure de que el vehículo a transferir no tiene ninguna carga, ya que es él quien tiene que realizar todo el proceso. Por su parte el vendedor deberá, una vez firmado el contrato, notificar la venta del vehículo.
Lo primero que hay que hacer para completar la transferencia del vehículo es asegurarse de tener todos los documentos necesarios para ello. Así, son imprescindibles el contrato de compraventa que refleja la información de ambas partes y del bien en venta, una fotocopia del DNI del vendedor, el DNI original del comprador, el permiso de circulación y el impreso de solicitud del cambio de titular. A estos documentos habrá que añadir el justificante de pago de Hacienda.
Antes de ir a la Jefatura de Tráfico, hay que abonar el impuesto de transmisiones patrimoniales correspondiente a Hacienda. Habrá que utilizar el modelo 620 o 621 dependiendo del tipo de transacción. Las tasas ha de abonarlas el comprador y varían entre un 4% y un 10% dependiendo de la Comunidad Autónoma de residencia del comprador.
Una vez que el comprador haya recopilado todos los documentos y haya abonado el pago correspondiente en Hacienda, deberá solicitar cita previa en Tráfico y acudir a la jefatura más cercana para hacer efectivo el cambio de titularidad del vehículo adquirido. Por último, habrá que pagar una tasa administrativa de 54’60 euros en el caso de los vehículos a motor y de 27’38 euros en el caso de los ciclomotores.
Para completar toda esta gestión se disponen de 30 días desde que se firma el contrato de compraventa. El proceso de transferir un vehículo puede ser relativamente engorroso pero no es complicado, por lo que evitar una gestoría para llevarlo a cabo puede suponer un ahorro para el bolsillo del comprador.
Source: Coches
