Hace algo más de 50 años, allá por 1970, Opel lanzó la primera generación del Manta, un atractivo coupé de 4,3 metros de longitud y cuatro plazas que nacía con un claro ADN deportivo. Su tracción trasera y su peso por debajo de los 1.000 kg lo dotaban una gran agilidad, pero contaba con unos motores que no le hacían brillar mucho en prestaciones hasta que llegó la versión Turbo –solo para Gran Bretaña–, que rendía 156 caballos y era capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 7,6 segundos.
En cualquier caso, aquella primera generación, que se comercializó durante cinco años, fue el inicio de una saga que después escribiría grandes páginas en la historia del deporte del motor, sobre todo en los rallies.
Cinco décadas más tarde, Opel ha querido rendir homenaje a aquel icónico modelo, y lo ha hecho creando un prototipo –único y que no está a la venta– con tecnología eléctrica, la que está más en boga actualmente. Es lo que se llama un “restomod”, la revisión de un clásico aplicando tecnologías actuales, y nosotros hemos tenido oportunidad de conocerlo y hasta subirnos a él, aunque no conducirlo. ¡Queda pendiente, Opel!
Lo cierto es que el Opel Manta GSe ElektroMOD se ha realizado con un exquisito respeto al modelo original, y la modernización estética es muy acertada, como se puede ver en las imágenes que acompañan a este artículo.
Un diseño con pedigrí
“El Manta GSe ElektroMOD es el resultado del trabajo de apasionados diseñadores, modeladores 3D, ingenieros, técnicos, mecánicos, expertos en producto y marca. Todos ellos aficionados de Opel hasta la médula, que aman los coches y se divierten desarrollando cosas nuevas. Con el Manta GSe se ha construido un puente desde la gran tradición de Opel hacia un futuro deseable y sostenible. Esta mezcla de espíritu y modernidad es absolutamente fascinante”, declara Pierre-Olivier García, director global de Diseño de Marca de Opel, en relación al proyecto.
Los seguidores de los modelos más recientes de Opel verán que el Manta GSe ElektroMOD cuenta con una evolución de la parrilla Vizor que equipan, por ejemplo, el Mokka y la última generación del Astra o Crossland, pero se le añade una propiedad digital, bautizada como “Pixel-Vizor”, que dibuja el logotipo de la marca en el centro y es capaz de exhibir mensajes e imágenes en su pantalla LED. A cada extremo, por cierto, se ubican las luces LED diurnas en formato horizontal, muy distintas a las dobles ópticas redondas que presentaba el modelo original de 1970.
La carrocería, además de por sus formas clásicas y musculosas, resalta por el color amarillo “neón” en oposición al negro del capó, y además porta en el lateral un pequeño logotipo de un pez Manta. También desaparecen los cromados y parachoques, mientras que la trasera lleva el nombre del modelo incrustado en el portón y, aquí sí, cuatro luces LED redondas con efecto tridimensional. Además, la imagen del conjunto queda potenciado por unas preciosas llantas de aleación ligera de 17 pulgadas.
Clásico moderno
En cuanto al interior, se mantiene el clásico volante de tres radios y la palanca de cambios. Los asientos son deportivos de la marca Recaro tapizados en cuero y Alcantara, elemento también presente en los revestimientos del salpicadero y en el túnel central.
Por su parte, y como concepción de coche de vanguardia, la instrumentación analógica da paso a dos pantallas digitales Pure Panel de 12 y 10 pulgadas, con información completa del coche y sobre todo del estado de las baterías y la autonomía.
Otro rasgo específico de este modelo es que el sistema de sonido está asociado a otra marca clásica, Marshall, mediante unos amplificadores que se conectan vía Bluetooth.
Motor cien por cien eléctrico
Este Opel Manta de siglo XXI cuenta con un motor eléctrico que sustituye al cuatro cilindros de gasolina original. El nuevo propulsor ofrece una potencia total de 108 kW, el equivalente a 147 caballos, con un par de 255 Nm disponible desde el momento en el que se pisa el pie del acelerador, algo que es la tónica habitual en los modelos provistos de esta tecnología.
Dada su naturaleza, el motor se pone en marcha sin hacer ningún tipo de ruido, y para moverse se puede optar por engranar la cuarta marcha y conducir automáticamente o cambiar de forma manual insertando las cuatro velocidades originales.
La potencia del motor se transmite al suelo mediante el eje trasero, un rasgo de buen deportivo, y la velocidad máxima está limitada a 150 km/h. La batería, con 31 kWh de capacidad, está ubicada en el maletero y ofrece una autonomía media de 200 km, pero lo mejor es que gracias al cargador de a bordo de 9 kW puede recuperar la energía en menos de cuatro horas, además de hacerlo también con las deceleraciones y frenadas.
Como ejercicio de estilo, desde luego el Opel Manta GSe ElektroMOD es fantástico, y además ha abierto el camino: habrá un modelo deportivo eléctrico en Opel de aquí a tres años.
Source: Coches