Uno de los modelos que sentó las bases de lo que en de la década de los ’70 debería ser un utilitario fue el Fiesta. Muy vinculado al desarrollo de la industria del automóvil en nuestro país, su lanzamiento vino acompañado de la apertura en 1976 de la primera planta de producción de la marca americana en España, concretamente en la localidad valenciana de Almussafes, todo un acontecimiento para la sociedad civil y empresarial de la época.
Ahora este fabricante habría decidido cesar su producción a mediados del año que viene (al menos eso indica un informe de una empresa británica) y para reemplazarlo todo apunta a que se diseñará un crossover pequeño “cero emisiones”. Ni siquiera se aprovecharía su denominación comercial que tantas alegrías le ha dado a esta marca.
El Fiesta y España
Con el Fiesta, Ford estableció un nuevo lenguaje dentro de una clase que, de alguna forma, revolucionó para convertirse enseguida en una seria amenaza para otros coches pequeños de esos años como el Seat 127 o el Renault 5.
Igualmente fue todo un éxito de ventas, pues en enero de 1979 se celebró el primer millón de unidades producidas, un récord tanto para la propia firma como para su segmento.
Desde su lanzamiento, los cinturones de seguridad automáticos o la luneta posterior calefactable eran de serie con opciones poco extendidas como el techo solar transparente de cristal.
En la actualidad, y después de siete generaciones, el Fiesta sigue teniendo bastante aceptación aunque, la verdad, no tanto como hace una década. Durante todo el tiempo que ha estado en el mercado se han vendido más de 17 millones de unidades en todo el mundo, cinco de las cuales han sido producidas en Almussafes.
Source: Coches