La llegada de un niño a la familia lo cambia todo, desde los horarios de sueño hasta el tamaño del coche. Si solo tienes un hijo y cuando compraste tu coche lo hiciste con cabeza y optaste por un modelo un poco más espacioso, acertaste. Pero si ya estáis esperando al segundo y os convertís en una familia de cuatro miembros… hay que empezar a pensar en invertir en un vehículo nuevo.
No hace falta que el nuevo modelo sea gran monovolumen de siete plazas (a no ser que pretendáis llenarlo) o un SUV enorme con un gasto de combustible disparatado. Simplemente se trata de valorar entre varias opciones, ver cual se ajusta más a vuestras necesidades y, por supuesto, que sea un coche que os guste y podáis disfrutarlo.
– Ford S-Max: el sucesor del C-Max, con un interior espacioso y cinco plazas reales. Por 23.222 euros.
–Fiat 500X: versión urbana y todoterreno, con un gran sistema de infoentretenimiento. Cuesta 19.950 euros, 13.685 euros con promoción.
–Opel Crossland: tomó el relevo del Meriva y aunque tiene una estética más SUV, es perfecto para colocar las sillitas de los niños. Por 16.950 euros.
–Nissan Qashqai: el todocamino más comprado del 2019 y lo que llevamos del 2020. Espacioso y seguro en la conducción. A partir de 18.500 euros.
–Renault Espace: es la única opción de siete plazas de esta lista, pero tiene un tamaño discreto y fácil de manejar. A partir de 33.584 euros.
–Toyota Prius: en su opción de cinco plazas es perfecto para familias de cuatro miembros. Motor híbrido y grandes sistemas de seguridad. Por 29.990 euros.
–Seat León ST: la variación familiar del favorito del año pasado. Grande y espacioso pero cómodo y urbano. Cuesta 24.260 euros.
-Volkswagen Golf Sportsvan: el más grande de la familia Golf. Un gran maletero de casi 600 litros para que no falte nada en vacaciones. Por 19.000 euros.
Source: Coches