Las estaciones de ITV siguen acumulando altas cifras de absentismo en España a pesar de la peligrosidad de conducir un vehículo que no haya superado estas pruebas (sobre todo en los modelos más antiguos) y las sanciones que están asociadas a pegatina de la ITV caducada. Las multas en el caso de circular van de los 200 euros y a los 500 euros, según la gravedad que revista.
Cuando nos compramos un turismo o una motocicleta nuevos no hay que renovar la ITV hasta que cumplen los cuatros años (tres en el caso de los ciclomotores). A partir de esta edad, deberán acudir cada dos años a las estaciones para renovar la pegatina y, en el caso de los coches, cuando tienen más de diez año hay que ir anualmente.
La pegatina de la ITV caduca en una fecha concreta y a partir de ese mismo día no existe una prórroga posible para evitar sanciones: se considerará que la ITV está caducada y se procederá a multar al propietario del vehículo en el caso de que los agentes de tráfico nos den el alto. Así se contempla en el Real Decreto 920/2017 que regula la inspección técnica de vehículos y en la ley de Tráfico.
Un mes de gracia
Sin embargo, sí que existe una prórroga a la inversa para renovar la ITV y no incurrir en una infracción. Tal y como se explica en el artículo 6.5 de este mismo Real Decreto, los conductores podrán renovar su ITV hasta 30 días antes de la fecha de caducidad sin perder días de validez y por el mismo precio. Este artículo, que cambia la situación que había hasta el 2017, queda redactado así:
«El plazo de validez de las inspecciones técnicas periódicas se obtendrá adicionando a la fecha en la que el resultado de la inspección haya sido favorable la frecuencia indicada en este artículo (es decir, si la fecha de caducidad es el 25 de enero de 2022 y nuestro coche tiene 5 años, tendremos que acudir a la ITV como tarde el 25 de enero del 2024). No obstante, si dicha fecha está comprendida en los 30 días naturales precedentes a la expiración del plazo de validez de la inspección anterior, el plazo de validez se obtendrá adicionando la frecuencia correspondiente a la citada fecha de expiración».
Por lo tanto, cualquier conductor dispone de 30 días de gracia para renovar con tiempo su pegatina de la ITV manteniendo intacta la siguiente fecha de caducidad y, así, ahorrarse una multa de más de 200 euros.
Source: Coches