Los vehículos de segunda mano han sido protagonistas estos meses ya que por sus ventajas económicas han sabido mantener las cifras de ventas a flote. Además, durante la vuelta al cole de septiembre ganaron aún más popularidad ante el interés de la gente para conseguir un coche barato y de manera inmediata y así evitar desplazarse en medios de transporte públicos. Prueba de ello es la ratio de 2’3 vehículos de ocasión vendidos frente a uno nuevo con las que se espera cerrar el 2020.
Sin embargo, la mayoría de vehículos de ocasión que triunfan por sus precios bajos y asequibles tienen una antigüedad que acentúa los fallos propios de la edad y, además, conlleva una mayor cantidad de emisiones. Las asociaciones del mundo de la automoción han expresado en repetidas ocasiones su preocupación ante el envejecimiento del parque automovilístico español, que contribuye a aumentar los niveles de contaminación y los accidentes de tráfico.
Según los datos de los que dispone la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam), la edad media de los coches de segunda mano que se han vendido a lo largo de este 2020 es de 11’1 años. En el caso de las operaciones entre particulares, que son el 56% del total, la media de edad es de 12’1 años. Igualmente, una de cada cuatro operaciones de este mercado de profesionales a particulares se hace con modelos de más de 10 años.
Aunque los coches de entre tres y cinco años de antigüedad hayan tirado del mercado los últimos meses, el protagonismo de las ventas en el mercado de ocasión entre año ha sido para los vehículos más antiguos. Los coches de más de 15 años representan el 34% del mercado.
Desde Ganvam advierten que la antigüedad del parque automovilístico español es un problema que se arrastra desde hace años, sobre todo en el mercado de segunda mano, y necesita de medidas que retiren de la circulación estos modelos y los sustituyan por vehículos más eficientes.
Source: Coches
