Casi todo el mundo en España se ha visto desde la ventanilla de su coche algún vehículo abandonado a un lado de la carretera. Lo más habitual es que, después de un tiempo, sea una grúa la que retire el automóvil para llevarlo a un desguace, pero lo que no muchos conductores desconocen es que puedes quedártelo en propiedad a través de una figura jurídica conocida como usucapión.
También conocida como prescripción adquisitiva o positiva, este concepto proviene del derecho romano, y está recogido en el Código Civil de España en el precepto 1930: «Por la prescripción se adquieren, de la manera y con las condiciones determinadas en la ley, el dominio y demás derechos reales. […] Se extinguen del propio modo por la prescripción los derechos y las acciones, de cualquier clase que sean«. Entonces, ¿que hay que hacer para beneficiarse de ella y quedarse con el coche abandonado?
Cómo ser propietario de un coche abandonado
Lo primero que se debe hacer es comprobar que el coche abandonado no sigue siendo propiedad de otra persona. Para ello, hay que solicitar un informe a la Dirección General de Tráfico (DGT) en el que aparezca quién es el titular del vehículo, y en el caso de que dicho propietario no lo haya dado de baja, deberás negociar con él un proceso de compraventa.
Si el automóvil ha sido dado de baja, podrás intentar beneficiarte de la usucapión, aunque no es para nada una tarea sencilla. Debes acreditar ante un juez que te has ocupado de mantener el coche en buen estado durante al menos tres años, por lo que no puedes coger cualquier vehículo abandonado y quedártelo automáticamente.
Para ello, debes socilitar a un juzgado que te declare propietario del vehículo, para lo que puedes presentar una Acta de manifestaciones mediante notario. Además, también puedes mostrar otros documentos como facturas de talleres, fotos del estado del coche antes y después e incluso la declaración de terceros.
Por lo tanto, debes saber que no es un procedimiento para nada simple. No basta con llegar y apoderarse del vehículo abandonado, sino que implica todo un proceso judicial que, en ocasiones, no termina como uno se espera. Cuando la usucapión o prescripción adquisitiva es más útil es en las situaciones en las que se compró un coche de segunda mano a alguien que no era el propietario.
¿Qué pasa si quien vendió el coche no es el propietario?
Aunque lo ideal a la hora de comprar un coche de segunda mano es pedir al vendedor toda la documentación, hay ocasiones en las que se es iluso y nos fiamos de quienes nos está traspasando el coche. Si pasado un tiempo te enteras de que no era el propietario real, hay que llevar a cabo un proceso similar: acreditar que, durante por lo menos tres años, has hecho uso del coche de buena fe, así como aportar el contrato de compra y el recibo de la ITV.
Source: Coches
