La Dirección General de Tráfico es la institución encargada de velar por la seguridad de los conductores en las distintas carreteras de España. Para ello, utiliza diferentes métodos, técnicas y leyes que debemos cumplir los ciudadanos para reducir el número de accidentes. De lo contrario, nos podríamos enfrentar a sanciones económicas que, además, nos llevarían a la pérdidas de puntos del carné de conducir.
Según el Reglamento General, cada uno de los vehículos a motor están obligados a incorporar «un aparato reproductor de señales acústicas que emite un sonido continuo, uniforme y de suficiente intensidad», con el fin de alertar a los distintos usuarios que transitan por la misma zona de la calzada, es decir, el clásico ‘pito’ o claxon.
Sin embargo, el uso excesivo de este elemento está totalmente prohibido y podría acarrear una sanción económica que puede oscilar entre los 80 y 200 euros. A continuación, os detallaremos las distintas formas correctas de utilizar el claxon y, además, los momentos donde podríamos ser multados por un agente que está observando un mal uso del mismo.
¿Cuándo podemos usar el claxon?
La Dirección General de Tráfico, para evitar un mal uso de este recurso de nuestro vehículo, recuerda y hace hincapié en los cinco momentos en los que se puede emitir este tipo de señales sonoras. La primera situación que vamos a mencionar es cuando estamos a punto de adelantar a un vehículo de dos ruedas en un paso a nivel o realizar dicha acción a pocos metros de este.
El segundo escenario más común es para tratar de evitar cualquier tipo de accidente. En este momento, un sonido a tiempo, con el fin de alertar a los demás conductores, puede llegar a ser muy importante para evitar cualquier tipo de susto inesperado.
Otro de los casos más importantes es cuando transitamos por una calzada muy estrecha y con muchas curvas. El sonido del claxon es muy importante para alertar a los demás usuarios de que estás pasando por ese lugar en concreto y evitar una posible colisión entre dos vehículos.
Asimismo, el uso del ‘pito’ del vehículo puede utilizarse cuando el coche tiene que circular como un servicio de emergencia debido a una urgencia médica. Por último, es de uso correcto cuando circulamos por un puente estrecho y sin apenas visibilidad. Este tipo de zonas se reconocen por la aparición de una señal donde se plasma una bocina blanca sobre un fondo azul y que cita textualmente: «uso obligatorio del claxon».
¿Cuáles son las sanciones por el uso indebido?
Como hemos mencionado anteriormente, el uso injustificado del claxon puede llegar a ser sancionable por los distintos agentes que velan por la seguridad de los conductores en las carreteras de nuestro país. A continuación, os detallaremos las distintas sanciones e infracciones más comunes que cometen los usuarios mientras están al volante y usan el ‘pito’ de forma errónea.
- Realizar señales acústicas sin motivo justificado es sancionado con 80 euros.
- No obedecer la señal R-319, que significa no utilizar la bocina, conlleva una multa de otros 80 euros.
- Emplear sonidos acústicos estridentes, es decir, que retumben de forma repetida y contundente, será sancionado con 80 euros.
- Circular con algún tipo de vehículo a motor sin tener incorporado el ‘pito’ acarreará una multa económica de 200 euros.
- Incorporar aparatos que emiten señales acústicas especiales a un vehículo de uso común y no prioritario o de transporte especial tendrá una sanción de 200 euros.
- Por último, circular con sonidos especiales en un transporte no prioritario será sancionado con 200 euros.
Source: Coches
