Pasar de un vehículo de combustión a uno 100% eléctrico o a un híbrido enchufable supone un gran cambio, siendo la hora de la carga uno de los momentos que más dudas generan a los usuarios. Y es que hay muchos falsos mitos que pueden generar cierta incertidumbre y que, sin duda, están frenando, entre otros muchos factores, su despliegue dentro del parque automovilístico. Conscientes de esta situación, en 20Minutos hemos querido abordar, de la mano de Norauto, los mitos más populares, ofreciendo una serie de consejos para realizar la carga con seguridad y prolongar la vida de las baterías. El objetivo es resolver las posibles dudas tanto de aquellos que acaban de pasarse a un coche eléctrico como de aquellos que planean hacerlo en un futuro próximo.
Mito Nº 1: la batería debe estar descargada
El primero de todos los mitos es el que dice que hay que esperar a que la batería se descargue completamente para cargarlo. Esta falsa idea surge de las baterías que antiguamente llevaban los teléfonos móviles y donde sí que era recomendable esperar a su completa descarga. Con las baterías actuales es contraproducente, ya que apurar el nivel de carga acorta la vida de la batería. Dejando que se descargue por completo se corre el riesgo de que el coche quede inmovilizado. De hecho, los fabricantes recomiendan siempre que estemos en un rango entre el 20 y el 80%.
Mito Nº 2: los cargadores rápidos
Aunque parezca que los puntos de recarga rápida son la mayor de las innovaciones tecnológicas, lo mejor es acudir a un cargador lento y específico para el día a día y dejar los cargadores rápidos para situaciones excepcionales. Y es que las baterías asumen mejor este tipo de carga lenta, haciendo que esta nos dure más años, tal y como sucede con un teléfono móvil, por ejemplo.
Mito Nº 3: la batería, siempre a tope
De hecho, lo recomendable es no superar en el uso del día a día, el 80% de carga de la batería, como ya hemos mencionado en el primer mito.
Mito Nº 4: si te vas un tiempo, mejor descargarla
El mito de que se puede dejar el coche estacionado sin batería durante periodos prolongados de tiempo no tiene ningún fundamento, de hecho, esto perjudica de manera muy notable a la batería.
Mito Nº 5: las temperaturas no afectan igual
Aunque las baterías de los nuevos vehículos están preparadas para soportar altas y bajas temperaturas, hay que tener en cuenta que las temperaturas extremas también afectan a las baterías de híbridos enchufables y eléctricos. Se degradan sus componentes y su autonomía se reduce. Por supuesto, disponen de sistemas de protección como, por ejemplo, el sistema de refrigeración líquida.
Mito Nº 6: las baterías explotan
De hecho, esto es algo muy poco habitual. Sin embargo, los pocos casos que han tenido lugar han alcanzado mucha difusión. Esto se debe a un control ineficiente de la temperatura de ésta por parte del sistema de gestión térmica de la batería (BTMS).
Recomendaciones para un uso correcto
- Estacionar el vehículo en un garaje o una zona resguardada de las condiciones meteorológicas adversas como la lluvia, el hielo, la nieve, el viento o las altas temperaturas.
- Consultar con frecuencia los datos de energía y carga que se muestran en el navegador del coche para conocer la situación real de la batería.
- Se recomienda cargar el vehículo antes de que la carga baje del 20% y no superar el 80%.
- No es necesario estar pendiente de que la carga no baje ni supere los porcentajes antes indicados. Se puede configurar para que esto sea así. Por ejemplo, si el coche se queda cargando durante la noche, se puede dejar programado para que corte cuando se llegue al 80%.
- Se aconseja acudir a tomas de carga lentas o semirápidas, evitando en la mayor medida de lo posible los cargadores rápidos para un uso continuado.
- Si se recarga nada más aparcar el vehículo, los sistemas de refrigeración de la batería ayudarán a su conservación.
- La conducción eficiente también favorece la vida útil de la batería. Hay que evitar los acelerones bruscos e intentar anticiparse a las circunstancias.
- Se recomienda no dejar el coche sin cargar durante mucho tiempo. Debe cargarse al menos una vez cada 15 días.
- Lo más recomendables es contar con un punto de carga doméstico. De esta forma, se puede tener un mayor control sobre las cargas, además de que estos puntos cargan a velocidades más lentas y, por tanto, menos dañinas para la batería.
- A la hora de hacer la carga, siempre hay que enchufar primero el cable al punto de carga y después al coche.
- Si se carga fuera, hay que elegir siempre el conector adecuado para el vehículo. No todos son iguales.
- Hay que seguir siempre todas las recomendaciones y especificaciones del fabricante del vehículo para alargar la vida útil de la batería.
Source: Coches