Los conductores españoles cada vez se fijan más en el coste de llenar el depósito de sus vehículos, por ello, en los últimos años el número de gasolineras ‘low cost’ ha experimentado un gran crecimiento, aunque aún existen voces que dudan sobre la calidad de estos combustibles.
Sin embargo, esa cuestión se ha desmentido, ya que toda la gasolina y diésel que se vende en España cuenta con un certificado de calidad. Por otra parte, hay conductores que dudan a veces sobre echar combustible premium de vez en cuando a su automóvil, es decir, la gasolina 98 y el diésel plus.
¿Es bueno repostar con gasolina premium periódicamente?
Todo dependerá del tipo de coche que tengamos y el uso que le demos. Por ejemplo, si utilizamos gasolina 98, esta evita las detonaciones prematuras en el motor, aunque es preciso indicar que su uso está recomendado para los coches deportivos, por lo que para los demás no tiene mucho sentido.
En el caso del diésel premium suele llevar más antioxidantes y puede ser beneficioso para el motor. En definitiva, cada propietario es quien decide si repostar con combustibles premium o no, pero hay que precisar que no pasa nada por mezclar ambos tipos de gasolinas o diésel.
¿Cuál es la diferencia entre diésel común y premium?
La principal diferencia entre ambos tipos de diésel radica en el número de cetano, que se refiere al tiempo que pasa desde que el combustible es inyectado en el cilindro hasta que comienza a quemarse.
Un diésel con un número de cetano más alto asegura una combustión más eficiente dentro del motor, lo que se traduce en menor consumo de combustible y mejor rendimiento. En concreto, el diésel común (o e+) tiene un índice de cetano de 51, mientras que el diésel premium (o e+10) tiene un índice de 55.
¿Cómo actúan los aditivos para gasolina?
Estos compuestos químicos están diseñados para proteger y mantener en buen estado los componentes del sistema de inyección de combustible. Además, ayudan a prevenir la corrosión, mejoran las emisiones de gases contaminantes y optimizan el rendimiento del motor.
Al agregar aditivos al combustible, el vehículo logra una aceleración más eficiente y se minimizan los problemas causados por combustibles de baja calidad, siempre y cuando estos cumplan con los estándares mínimos exigidos por la Unión Europea. La principal ventaja de los aditivos es el ahorro de combustible, ya que aumentan la autonomía del vehículo.
Source: Coches
