Madrid, Barcelona y Valencia concentran hasta el 35% de los puntos de recarga que existen en España a día de hoy, facilitando la compra de vehículos eléctricos en estas ciudades. Obviamente, esta acumulación desanima a la gente, sobre todo, de zonas rurales a adquirir este tipo de coches.
En total, se calcula que hay instalados unos 4.545 puntos de recarga para coches eléctricos en toda España, una cifra muy baja en comparación con nuestros vecinos europeos. El año pasado ya nos quedamos fuera del top ten europeo y este 2020 llevamos el mismo camino.
Pese a todo pronóstico, y por otro lado, las ventas de coches eléctricos van aumentando trimestre tras trimestre y desde Aedive (Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico) se calcula que ya son más de 63.000. Así que pronto esta falta de puntos de recarga supondrá un verdadero problema para abastecer a todos los vehículos sostenibles que se hayan matriculado.
De todas formas, se calcula que para 2023 haya unos 100.000 puntos más instalados de manera pública y privada de la mano de Endesa y, por parte del sector privado, Iberdrola anunció 25.000 estaciones de carga para el año próximo.
Estas electrolineras, como se ha decidido llamarlas, pueden localizarse de manera muy sencilla gracias a una serie de aplicaciones que, al funcionar por GPS y estar conectadas a la red, posicionan en el mapa las coordenadas exactas de las estaciones de carga disponibles. Una de las más accesibles y de fácil uso es Google Maps.
Pero además de la app por excelencia para recorrer carreteras, hay otra serie de mapas disponibles que facilitan la tarea de recorrer las carreteras españolas a bordo de un coche eléctrico. Chargemaps y Electromaps son algunas de ellas. Además, hay muchos coches eléctricos que en sus sistemas de infoentretenimiento sitúan estos puntos en el mapa, para que los trayectos sean más sencillos y placenteros.
Source: Coches
