Algunos vehículos diésel tienen un pequeño tapón azul al lado de la boca del depósito del gasóleo. El AdBlue es un componente que se añade a los motores diésel para reducir las emisiones de estos vehículos y que está fabricado a partir de urea. Muchos vehículos diésel lo usan como sistema para reducir las emisiones y poder superar las ITV e ir adecuándose a las normativas europeas.
El Adblue no requiere de un mantenimiento específico, pero sí es importante revisar el depósito de vez en cuando. Es un líquido que no contamina, es incoloro e inodoro, y reduce las emisiones contaminantes producidas tras la combustión del motor, para que así los fabricantes cumplan con la normativa Euro 6.
Aunque no sea un sistema complejo, desde Euromaster advierten además que el AdBlue es muy propenso a solidificarse, lo cual puede producir obstrucciones y un mal funcionamiento de la propia bomba. Este proceso deriva en una avería del vehículo que puede costar entre 1.000 y 2.000 euros de reparar en función del modelo de nuestro coche.
Para evitar este tipo de daños, se recomienda chequear el sistema del Adblue en cada revisión general del vehículo por años o kilómetros recorridos. Así se pueden detectar a tiempo fugas o limpiar los inyectores de Adblue si han quedado obstruidos. Además, el Ablue se agota y es necesario ir rellenándolo. De no hacerlo, el motor podría incluso dejar de funcionar ya que superaría la normativa de emisiones sin este líquido.
Desde cuándo se utiliza el Adblue
Son los vehículos diésel fabricados a partir del 2014 los que llevan incorporado este sistema combinado de reducción de emisiones. Para avisar a los conductores de que hay que rellenar el depósito, el sistema de a bordo del vehículo se encarga de emitir el correspondiente mensaje cuando detecta que el depósito está llegando a su fin.
La mayoría de vehículos hace varios avisos previos según van restando kilómetros e, incluso, si el nivel de AdBlue es mínimo se enciende la avería de fallo de motor. En función de la marca, este líquido se rellena cada 10.000 a 20.000 kilómetros recorridos.
Source: Coches
